jueves, 29 de diciembre de 2011

CONOCIMIENTO SOBRE LOS CAMINOS DE DIOS!

¡Estamos enfrentando un tiempo en el cual la palabra liberación tendrá un
significado completamente nuevo! En el pasado, cristianos relacionaban
principalmente a la liberación con sanidad física, pero ¡pronto la máxima
liberación será del temor y terror!

La liberación en este tiempo significará tener una “palabra clara del
cielo.” Jesús dijo que los corazones de los hombres les fallarían por temor
al ver cosas terribles suceder en esta tierra (ver Lucas 21:26) Incluso, gente
clamará por conocer lo que Dios hará en el futuro. Caminarán en distintas
direcciones queriendo escuchar la voz de alguien tranquilo, pacífico y no
loco. Ellos clamarán, “¡Por favor dime! ¿Es este el juicio de Dios?
¿Cuándo va a acabar todo?”

¿Y quién cree usted que tendrá las respuestas? ¡Usted! ¡El cristiano
ordinario que ha estado en comunión con Dios! Usted estará lleno de calma y
paz mientras todo a su alrededor está cayéndose en pedazos, pues Dios está
con usted y usted está escuchando palabras del cielo. ¡Él le advirtió que
esto sucedería y Él prometió protegerlo!

Yo creo que Dios va a utilizar a un remanente santo en los últimos días para
agitar a multitudes, para avivar a pastores y despertar a iglesias. Este
ejército tornará los corazones de la gente a Dios, trayéndolos al
arrepentimiento -a través de la oración y de la reprobación del pecado.

Cuando hablo de un remamente santo en entrenamiento no significa de un
ejército de predicadores, evangelistas y misioneros. Estoy hablando de santos
ordinarios, amantes de Jesús quienes ellos mismos serán señales y maravillas
de paz y calma en este mundo. Dios no quiere un ejército profesional y
entrenado por métodos del hombre. ¡Él quiere hombres y mujeres entrenados en
oración por medio del Espíritu Santo! Dios está buscando a creyentes que se
encierren con Él, que preparen sus corazones delante Él, y que aprendan a
escuchar Su voz.

¿Lo anterior lo describe a usted? ¿Es su vida ahora testimonio ante un mundo
temeroso y agitado? Le exhorto a que pase tiempo a solas con Dios y deje que le
hable. Pídale que le revele su pecado en su vida. Deje a un lado todo aquéllo
que el Espíritu Santo traiga convicción de pecado. Póngase a Su disposición
al encomendarse a la oración. De esta manera, usted será un soldado listo para
formar parte de Su gran ejército de los últimos tiempos.

DAVID WILKERSON

miércoles, 28 de diciembre de 2011

EL PODER LE PERTENECE


“Reuniendo a sus doce discípulos, les dio poder y autoridad sobre todos los
demonios y para sanar enfermedades.” (Lucas 9:1).

Jesús le dio a sus discípulos poder no porque ellos eran ambiciosos, sino
porque ellos le pertenecían a él. Al ser propiedad de Cristo el recibir su
poder no es negociable. El poder nace de la pertenencia. Esta última trae
consigo poder real.

Muchos cristianos viven vidas sin poder -realizan cotidianamente prácticas
pecaminosas, cuentan con un testimonio pobre, una vida espiritual débil;
carecen de fervor, de una vida radical de oración y de oraciones contestadas.

¿ Se siente usted sin poder? Este corto versículo está lleno de palabras
poderosas:

Jesús llamó a estos discípulos, lo que en esencia excluye nuestra propia
agenda, dirección, voluntad propia, o recurso de poder.

“Reuniendo”— este poder no se encuentra contenido en vasijas individuales
sino en una comunidad para que éste actúe en los propósitos del reino.

“Discípulos”— aquéllos que abandonan todo para seguir la vida, la
enseñanza y la dirección del maestro.

“Dio”—demuestra que no podemos hacer nada a menos de que Jesús nos dé
el poder para realizarlo.

“Poder”— no es lo que nosotros deseamos, trabajamos o luchamos por, sino
que es aquél que proviene sola y exclusivamente a través de Su provisión.
Nosotros nunca podremos tener el mando de esta parte de nuestra historia como
cristianos. A todo seguidor de Jesús le ha sido encomendado esperar hasta que
reciba poder de lo alto.

¿Le hace a usted falta poder? No hay otra forma de obtenerlo mas que le sea
dado por el único al que le pertenece. Jesús tiene el poder para darle a
aquéllos que son total y completamente suyos.

No luche por obtener poder. Desee pertenecer -completa, apasionada, humilde y
ambiciosamente a aquél que su corazón anhela. Entonces un poder que va más
allá de su imaginación vendrá sobre usted.

GARY WILKERSON


martes, 27 de diciembre de 2011

¿QUIEN SOY YO?



“Aun siendo yo íntegro, él no me tomaría en cuenta,
¡despreciaría mi vida!” (Job 9:21).

Dios parece tan maravilloso y grande;
Yo parezco muy pequeño e imperfecto.
Él le ordena al sol que salga;
Yo me rompo en mil pedazos en medio de la tempestad.
Él tiene dominio sobre los cielos y camina sobre el agua,
Pero Él va conmigo, aunque no le vea.
Él controla las constelaciones estelares.
Si yo clamo a Él
Y Él contesta,
Aún yo no creeré que Él escuchó mi voz.
Siento que Dios me ha herido
Sin razón.
Él es el Juez,
¿Pero quien apelará por mí?
Cuando trato de justificarme a mí mismo,
Mi propia boca me condena.
Los sentimientos crecen
Incluso, de ser perfecto,
Yo no lo sabría
Yo despreciaría mi vida
Porque nosotros somos del ayer
Y no sabemos nada,
Pues la vida es una sombra.

jueves, 22 de diciembre de 2011

¡LA IGLESIA DE SION!

La fuerza motora detrás de la iglesia de David fue una total dependencia del
Espíritu Santo. He aquí lo que distinguió a David:

"Samuel tomó el cuerno del aceite y lo ungió en medio de sus hermanos. A
partir de aquel día vino sobre David el espíritu de Jehová." (1 Samuel
16:13).

Cuando David se encontraba en su lecho de muerte, él le expresó a su hijo
Salomón: “Quiero decirte por qué Dios me ha bendecido. Quiero compartir
contigo el secreto de mi ministerio.” Escuche las últimas palabras de David
dirigidas a su hijo: “El espíritu de Jehová habla por mí, su palabra está
en mi lengua.” (2 Samuel 23:2).

David estaba diciendo: “Yo no confié en conocimiento y ni sabiduría. Yo no
confié en ninguna parte de mi carne. ¡Yo fui un hombre débil - pero dependí
del Espíritu Santo! Toda palabra que yo pronuncié fue bajo Su unción. ¡Sus
palabras llenaron mi boca!”

Cuando abrimos las puertas del ministerio de Teen Challenge en Nueva York,
nuestro motto fue, “¡Aquí el Espíritu Santo está a cargo!” No fue,
“cómo podemos predicar” para salvar a miembros de pandillas. Los
pandilleros no se postraron en sus rodillas porque nosotros les predicamos
sermones concisos. Ellos no sintieron la convicción del Espíritu a través de
ilustraciones claras o historias cotidianas. ¡No! Estos ex-drogadictos
testificaron ante sus amigos, “¡Un día yo estuve en la calle, como tú.
Pero mírame ahora! ¡El Espíritu de Dios me ha cambiado!”

Salomón habló de árboles, hisopos, bestias, peces, insectos. Pero David
habló sobre la intimidad con el Señor, sobre quebrantamiento y sobre tener un
espíritu contrito. David obtuvo convicción y transformación mediante su
propia predicación. Él valoró tanto la presencia del Espíritu Santo en su
vida que le pidió al Señor que Su Espíritu nunca se apartara de él. ¡David
sabía que no era nada sin el Espíritu Santo!

Pablo dijo,“y ni mi palabra ni mi predicación fueron con palabras
persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de
poder, para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres,
sino en el poder de Dios.” (1 Corintios 2:4-5).

“De estas cosas hablamos, no con palabras enseñadas por la sabiduría
humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo
espiritual. Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu
de Dios, porque para él son locura; y no las puede entender, porque se han de
discernir espiritualmente.” (vv. 13-14).

DAVID WILKERSON

miércoles, 21 de diciembre de 2011

CONTINUE ENAMORADO

“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte ni la vida, ni ángeles ni
principados ni potestades, ni lo presente ni lo por venir, ni lo alto ni lo
profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que
es en Cristo Jesús, Señor nuestro.”
(Romanos 8:38-39)

La muerte es profunda y oscura.
La vida es vanidad e irrita al espíritu.
Principalidades y potestades son inamovibles,
Cosas presentes son inciertas:
Cosas venideras son desconocidas.
Existen misterios en las alturas y profundidades
De este universo,
Sin embargo ninguno de ellos nos podrá separar
Del amor de Dios,
Que es en Cristo Jesús, Senor nuestro.
¿Quién podrá separarnos de Su amor?
¿Tribulación o aflicción?
¿Persecución o hambruna?
¿Desnudez, peligro, o espada?
¡No! Pues Dios es amor.
Su amor, sobrepasa todo entendimiento—
Unión perfecta—
Así que camine en Su amor.
Aquél que habita en el amor
Habita en Dios —
Y Dios en él.

DAVID WILKERSON

martes, 20 de diciembre de 2011

¡LA IGLESIA DEL ESPIRITU SANTO!

Usted nunca debe ir a la iglesia sin antes haber orado, “¡Dios, dame oídos
del Espíritu Santo para escuchar. Ayúdame a escuchar y a aplicar tu Palabra
en mi vida!” Así como el Espíritu Santo unge la lengua del pastor para que
hable, así Él unge sus oídos para que escuchen.

En la iglesia del Espíritu Santo siempre escuchará un clamor desde las
entrañas por arrepentimiento. De hecho, usted no puede ser una persona llena
del Espíritu Santo hasta que no “clame desde sus entrañas”. ¡Y esto es
algo que Salomón nunca hizo!

La iglesia del rey David no era perfecta. Incluso, ésta se asemeja a la
iglesia de Corinto. David cometió adulterio, mató a un hombre inocente,
caminó por una etapa de horrible decepción. Sin embargo, tras haber pecado,
David pronunció este agonizante clamor desde lo más profundo de su
ser:“¡Lávame más y más de mi maldad y límpiame de mi pecado!, porque yo
reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí. Contra ti,
contra ti sólo he pecado...No me eches de delante de ti y no quites de mí tu
santo espíritu.” (Salmo 51:2-4, 11).

¡Un clamor desde el corazón es lo que distingue a la iglesia del Espíritu
Santo! Por supuesto, existen personas en esta iglesia que fallan y viven en
decepción. Pero como David, éstas han llegado a ser tan sensibles a la obra y
al mover del Espíritu Santo, que no necesitan a un profeta que les diga que han
pecado. ¡Ellas se arrepienten antes de que un profeta se les acerque - porque
se sienten heridos por su pecado!

David expresó sobre su pecado: “Me rodearon los lazos del seol.Tendieron
sobre mí lazos de muerte. En mi angustia invoqué a Jehová, a mi Dios
clamé...Envió desde lo alto y me tomó. Me sacó de caudalosas aguas. Me
libró de un poderoso enemigo, y de los que me aborrecían...” (2 Samuel
22:6-7, 17-18).

¡Dios conducirá a la ruina a la iglesia de Salomón y resucitará a la
iglesia de David! Esta iglesia del remanente se lamentará ante el pecado.
¡Ésta clamará en angustia y arrepentimiento y será completamente
dependiente del Espíritu Santo!

“Después de esto volveré y reedificaré el tabernáculo de David, que está
caído; y repararé sus ruinas,y lo volveré a levantar” (Hechos 15:16).

DAVID WILKERSON

martes, 22 de noviembre de 2011

CONOCIENDO LA MENTE Y LA VOLUNTAD DEL SEÑOR

“El deseo de los humildes oíste, Jehová; tú los animas y les prestas
atención” (Salmo 10:17).

En este versículo David presenta un sencillo plan conformado por tres pasos
para conocer la mente y la voluntad de Dios en su vida:

* Presénte a Dios su petición (ore)
* Prepare su corazón para escuchar Su voz
* Él le permitirá conocer - el Espíritu Santo le hablará

Muy pronto, Dios va a derramar de su gloriosa copa la porción más grande del
Espíritu Santo que el mundo haya visto jamás. Una gran convicción del
Espíritu Santo tocará a muchos de sus vecinos, compañeros de trabajo y
miembros de familia aún no salvos.

Gente por todas partes se encontrará herida y dejará de asistir a iglesias
muertas en busca de unas que caminen con Dios. ¡Estos individuos estarán
desesperados por encontrar a alguien cuyo corazón esté listo!

Dios va a utilizar a miles de siervos ordinarios para su obra en los últimos
tiempos, en particular para ministración de persona a persona. Entonces le
pregunto: ¿está usted preparando su corazón ahora mismo para que Su obra sea
hecha, en y a través de usted?

Confiésele hoy a Dios: “¡Oh, Señor, yo quiero que cuentes con mi vida! Sé
que ahora mismo solamente me alimento de pan -en un desierto de desesperanza.
Pero ¡yo quiero vivir!”

Sumérjase en Su Palabra. Aprenda a buscarle diariamente. ¡Existe un poder
revolucionario para la preparación de su corazón! Es a través de esta
preparación que el significado y la plenitud vendrán a su vida. ¡Sus
sentimientos y personalidad cambiarán, y el poder será derramado en usted!

Cuando Dios vea que usted se encuentra listo, Él le traerá grandes
oportunidades para que participe en Su obra. Usted incluso no tendrá que dejar
su hogar. ¡Dios le traerá las necesidades a su puerta!

El poderoso Dios al que servimos está preparando a Su pueblo en este mismo
momento para su grandiosa obra.

“Jehová saldrá como un gigante y como el de un guerrero despertará su
celo; gritará, dará su grito de guerra, prevalecerá sobre sus enemigos.”
(Isaías42:13).

¡Prepare su corazón para encontrarse con Él! ¡Llegue a ser un siervo listo,
equipado y preparado para su gran derramamiento de los últimos tiempos y Su
gloria vendrá a su vida en esta hora final!

DAVID WILKERSON

CONOCIENDO LA MENTE Y LA VOLUNTAD DEL SEÑO

“El deseo de los humildes oíste, Jehová; tú los animas y les prestas
atención” (Salmo 10:17).

En este versículo David presenta un sencillo plan conformado por tres pasos
para conocer la mente y la voluntad de Dios en su vida:

* Presénte a Dios su petición (ore)
* Prepare su corazón para escuchar Su voz
* Él le permitirá conocer - el Espíritu Santo le hablará

Muy pronto, Dios va a derramar de su gloriosa copa la porción más grande del
Espíritu Santo que el mundo haya visto jamás. Una gran convicción del
Espíritu Santo tocará a muchos de sus vecinos, compañeros de trabajo y
miembros de familia aún no salvos.

Gente por todas partes se encontrará herida y dejará de asistir a iglesias
muertas en busca de unas que caminen con Dios. ¡Estos individuos estarán
desesperados por encontrar a alguien cuyo corazón esté listo!

Dios va a utilizar a miles de siervos ordinarios para su obra en los últimos
tiempos, en particular para ministración de persona a persona. Entonces le
pregunto: ¿está usted preparando su corazón ahora mismo para que Su obra sea
hecha, en y a través de usted?

Confiésele hoy a Dios: “¡Oh, Señor, yo quiero que cuentes con mi vida! Sé
que ahora mismo solamente me alimento de pan -en un desierto de desesperanza.
Pero ¡yo quiero vivir!”

Sumérjase en Su Palabra. Aprenda a buscarle diariamente. ¡Existe un poder
revolucionario para la preparación de su corazón! Es a través de esta
preparación que el significado y la plenitud vendrán a su vida. ¡Sus
sentimientos y personalidad cambiarán, y el poder será derramado en usted!

Cuando Dios vea que usted se encuentra listo, Él le traerá grandes
oportunidades para que participe en Su obra. Usted incluso no tendrá que dejar
su hogar. ¡Dios le traerá las necesidades a su puerta!

El poderoso Dios al que servimos está preparando a Su pueblo en este mismo
momento para su grandiosa obra.

“Jehová saldrá como un gigante y como el de un guerrero despertará su
celo; gritará, dará su grito de guerra, prevalecerá sobre sus enemigos.”
(Isaías42:13).

¡Prepare su corazón para encontrarse con Él! ¡Llegue a ser un siervo listo,
equipado y preparado para su gran derramamiento de los últimos tiempos y Su
gloria vendrá a su vida en esta hora final!

DAVID WILKERSON

viernes, 18 de noviembre de 2011

DIOS NO HA DESFALLECIO

“¿No has sabido, no has oído
que el Dios eterno es Jehová,
el cual creó los confines de la tierra?
No desfallece ni se fatiga con cansancio,
y su entendimiento no hay quien lo alcance”
(Isaías 40:28).

Existe una ignorancia de Dios
Que presume que Él no se revela más a sí mismo
en los momentos de crisis y necesidades del hombre-
Que presume que Él está muerto o dormido,
Incapaz de monitorear o guiar los pasos del hombre.
Pero, ¿quién es el hombre para evaluar a Dios?
¿Quién se le asemeja
o con quién se le compara?
¿No has sabido,
no has oído?
El Dios eterno,
El Dios que creó los confines de la tierra,
No se duerme.
Él no desfallece,
Ni se fatiga.
Mas los que esperan en Él
Tendrán nuevas fuerzas
Levantarán alas como las águilas
Correrán y no se cansarán,
caminarán y no se fatigarán.

jueves, 17 de noviembre de 2011

DEJE DE COMPARARSE

“... y temió el pueblo delante de Jehová....Ellos fueron y comenzaron a
trabajar en la casa de Jehová de los ejércitos, su Dios” (Haggai 1:12, 14)
Los israelitas se dieron cuenta de que estaban enfocados en sus propios
intereses y regresaron a reconstruir el templo. Ellos acudieron al lugar donde
deberían de estar - ¡construyendo la casa de Dios!

Ellos se pararon frente a los cimientos del templo y observaron cómo las
murallas empezaban a edificarse. Pero algo estaba mal pues ¡muchos de los
ancianos empezaron a sollozar! ¿Por qué? Porque hace sesenta y ocho años
ellos habían visto el esplendor del templo de Salomón y el templo actual no
le llegaba a la medida. ¡Este último no era nada!

Le gente empezó a hablar de la pasada gloria diciendo, “Este templo no tiene
arca, ni propiciatorio o querubin. No hay fuego consumidor en el altar, ni
shekinah cayendo gloriosamente sobre la casa. Después de todo nuestro trabajo,
de todo nuestro sacrificio y obediencia, de haber puesto los intereses de Dios
primero, simplemente ¡este templo no está a la altura! Éste no se compara al
que vimos con anterioridad. ¿Por qué seguimos luchando, por qué seguimos en
esto cuando vemos pocos resultados ante lo mucho que hemos hecho? ”

¡Hoy día, un ejército del pueblo de Dios se está dando por vencido porque
piensan que nunca estarán a la altura! Como los israelitas, ellos han
regresado al Señor, lo han puesto a Él como su prioridad, buscan Su voluntad,
construyen Su casa. Pero cuando observan sus vidas, ellos dicen, “¡Después
de todas mis luchas tengo muy poco qué mostrar! Poseo muy poco de la santidad
de Dios, muy poco de su gloria en mi vida. Comparado con otros cristianos, yo
nunca llegaré a su altura. Entonces, ¿para qué seguir luchando? Nunca
obtendré la victoria.”

Estoy convencido que ésta es la razón por la que muchos cristianos se dan por
vencidos en la batalla. ¡Ellos se comparan con otros creyentes y se desaniman
porque se sienten inferiores!

Si usted solamente es honesto con Dios y no trata de medirse a sí mismo con
base en el desempeño de otras personas sino en su amor por Jesús, usted puede
estar seguro que está creciendo - y ¡Dios promete que estará con usted!

Amado, usted puede tomar nota de esto, porque es Dios quien se lo promete.
Desde el preciso momento en que usted se vuelve a enfocar en construir el
cuerpo de Cristo - dejando atrás el compararse con otros, haciendo a un lado
sus caminos egoístas, y permite que Él se convierta en su todo -usted
empezará a ver Sus múltiples bendiciones. ¡Usted literalmente puede tomar
nota de esto! ¡Usted sabrá que Él lo está favoreciendo, sonriéndole,
regocijándose en usted!

DAVID WILKERSON

miércoles, 16 de noviembre de 2011

EZEQUIAS - ¡EL HOMBRE QUE ESCAPO UN JUICIO DE MUERTE!

“En aquellos días Ezequías enfermó de muerte. Y el profeta Isaías hijo
de Amoz, vino a él y le dijo: «Esto dice Jehová: "Ordena los asuntos de tu
casa, porque vas a morir. Ya no vivirás". Entonces volvió Ezequías...hizo
oración a Jehová” (Isaías 38:1-2).

Él era un rey que se encontraba en la cima de su victoria,
Librado milagrosamente por Dios
Del ejército del rey Senaquerib.
Él era rico y reconocido
Cuando de pronto la enfermedad vino a él,
Llevándolo al borde de la muerte.
El profeta le advirtió,
“Prepárate para morir,
estás invadido de tu enfermedad.”
Pero el rey amaba vivir,
Y al voltear su cabeza hacia la pared
Clamó y oró al Señor
Por una nueva oportunidad de vida.
Dios lo escuchó y le dió quince años más.
Pero, ¿cómo debe de vivir un hombre
Que ha conquistado a la muerte?
Así como muchos sobreviven
Un cercano llamado a la muerte.
¿Acaso éste no debe vivir cada día con agradecimiento,
Dando todo de sí mismo a Dios y a la humanidad?
Pero el camino que toma el hombre bajo el dominio de su carne hace lo
contrario.
El rey empezó a vanagloriarse-
Se sumergió en el lodo del materialismo,
Ostentando sus tesoros frente a extranjeros.
Un segundo mensaje del profeta fue dado
Uno de juicio acerca de su posteridad
Debido a su orgullo e ingratitud.
Y ¿cuántos hoy se les ha dado
Una nueva oportunidad de vivir,
Para tan sólo invertir los años que les han sido prestados
En alcanzar egoístamente cosas
Que no tienen valor?
La eternidad revelará
Que hubiera sido mejor
Para algunos morir
Que haber escapado del juicio.

DAVID WILKERSON

martes, 15 de noviembre de 2011

LA NOVIA DE CRISTO

¿Qué pensaría un hombre si su futura esposa lo invitara a su casa, se
sentara con él en la sala y después lo abandonara? Mientras él la espera,
ella trabaja en la cocina, limpia los muebles y el piso -y ¡nunca le dirige la
palabra!

Jesús sufre el mismo dolor que cualquier hombre sufriría si su amada
continuamente lo alabara, diciéndole, “Te amo” una y otra vez, pero ¡le
muestra poca o nada de atención!

Su amada podrá decir, “Bueno, él siempre está en mi mente.” Yo he
escuchado a gente decir acerca de Jesús: “Él está en mi mente todo el
día, en todo lo que hago.” Pero, ¡usted puede tenerlo a Él en su mente y
aún así descuidarlo! Cuando una prometida hace eso, ¡su llamado amor es una
mentira! Ella le podrá decir a su futuro esposo que verdaderamente lo ama,
pero sus acciones no lo muestran.

El Señor pregunta, “¿Se olvida la virgen de su atavío o la desposada de
sus galas? Pero mi pueblo se ha olvidado de mí por innumerables días.”
(Jeremías 2:32). David también dijo que Israel continuaba olvidándose de su
Señor: “Olvidaron al Dios de su salvación, que había hecho grandezas en
Egipto” (Salmo 106:21).

¡El Señor mencionó Su dolor en las Escrituras para que todo el mundo pudiera
verlo! Él expresó abiertamente, “Mi pueblo me descuida por largos días!”
¿Por qué el Señor le dice al mundo acerca de tal descuido? ¿Acaso las
diferencias entre dos personas que se aman no deben mantenerse en secreto? No-
¡Él quiere que nosotros separamos cuan dolido Él está! Él le dice a todo
el mundo ¡porque su corazón está muy quebrantado por nuestras acciones!

Imagine que usted es una joven mujer comprometida que va en camino a la iglesia
junto con su futuro esposo. Usted le agarra su mano y le dice a todos, “Nos
vamos a casar. Lo amo -¡él es absolutamente maravilloso!” Pero tan pronto
como usted sale de la iglesia, ¡usted no le dirige la palabra a su prometido!
¿Qué debe pensar su prometido ante esta situación?

Yo no quisiera una prometida que manifiesta mis virtudes, que dice cosas lindas
de mi en público, que me expresa cuan preciado soy, y posteriormente es fría y
evita pasar tiempo conmigo. ¡Esto no es verdadero afecto!

Amado, si usted no pasa diariamente tiempo con Jesús -si no dedica un tiempo
de oración en Su presencia, buscándole en Su Palabra -usted no lo ama.
¡Usted le está rompiendo Su corazón!

lunes, 14 de noviembre de 2011

CONSERVANDO LA BENDICION Y EL FAVOR DE DIO

]

Dios bendice a aquéllos que caminan fielmente con Él. ¡Dios manifiesta su
favor en aquéllos que le favorecen!

¿Cómo es que naciones, familias, individuos pierden la bendición y el favor
de Dios? El profeta Hageo habla al respecto. Él dice que la primer razón se
debe a que el interés propio reemplaza a los intereses de Dios.

“No ha llegado aún el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea
reedificada” (Hageo 1:2). ¡Los israelitas dejaron de construir la casa del
Señor para poder construir sus propias casas!

Esta escena aconteció sesenta y ocho años después de que el templo de
Salomón fuera destruido. Un remanente había regresado a Jerusalén tras
haber sido cautivos en Babilonia con el objetivo de reconstruir la casa de
Dios. E incluso, ¡ellos establecieron los cimientos para la edificación del
templo con celo y entusiasmo!

Sin embargo, posteriormente ellos se enfrentaron a cimientos duros
-dificultades y desánimo. Lentamente perdieron el interés en la obra de Dios,
diciendo, “Este no es el tiempo. Estamos teniendo muchos problemas. Además,
estamos invirtiendo mucho tiempo en esto y estamos descuidando a nuestras
familias y negocios.”

Uno por uno, se hizo a un lado en pos de sus propios intereses. ¡Los
menesteres del Señor que tenían que ver con su propio bienestar llegaron a
ser secundarios! Ellos empezaron a construir sus propias casas y usaron la
madera que habían guardado para edificar el templo.

¿Cómo hoy en día los creyentes pierden la bendición y el favor de Dios?
¡Al dejar de obrar en Su templo! Esto sucede cuando dejamos de orar y de
buscar a Dios - ¡cuando dejamos de edificar Su cuerpo espiritual!

Hageo hace referencia a este problema: Cuando la gente puso los intereses de
Dios primero, Él proveyó su comida y sustento. Incluso, ellos en todo sentido
fueron cuidados por Él. Sus viñedos crecieron, sus uvas eran grandes, ellos
durmieron en paz y sus niños danzaban por las calles. Ninguno de sus enemigos
prevalecieron contra ellos. Fue un tiempo maravilloso de la bendición de Dios
en sus vidas, pero ¡su gente terminó absorbida por sus propios intereses!

¡Esto es lo que está sucediendo hoy! Nuestro mundo está consumido en sí
mismo -orgullo, ambiciones y voluntades propias - ¡cada persona está en busca
de sus propios intereses! De ahí que halla tanta gente embriagada, sumida en
drogas, y caminando en oscuridad y confusión.

Dios dice, “Yo llamé la sequía sobre esta tierra...y sobre todo trabajo de
sus manos” (Hageo 1:11). Él está diciendo, “¡Si empiezas a descuidar tu
alma y pones atención en cosas materiales, entonces terminarás sin gozo,
insatisfecho, vacío y seco! Yo quiero que pongas mis intereses primero para
que pueda bendecirte y favorecerte nuevamente!”

viernes, 11 de noviembre de 2011

¡DIOS SABE QUÉ ES LO MEJOR PARA NOSOTROS!

Hay tiempos cuando Dios nos quita ciertas cosas y otros, cuando oramos por
cosas que pensamos necesitar y Dios no nos las concede. Sin embargo,
“...Jehová conoce el camino de los justos...” (Salmo 1:6). ¡Un día las
acciones de Dios nos mostrarán que todo fue para nuestro beneficio y el de Su
Reino!

La verdadera satisfacción en la vida proviene de estar en la perfecta voluntad
de Dios, haciendo Su obra, viviendo conforme a Su propósito. Pero muchos de
nosotros estamos convencidos de saber lo que necesitamos para sentirnos plenos
y felices. Y, en la mayoría de los casos, ¡lo que creemos que es lo mejor
para nosotros nos conduce a la ruina! Nunca en la historia de la humanidad,
Dios le ha quitado algo a uno de Sus hijos sin darle algo mejor, más bello, y
con mayores satisfacciones.

Lo que Dios tiene para nosotros no debe causarnos temor. ¡Él no solamente
sabe qué es lo mejor para nosotros sino que Él quiere que tengamos lo mejor!
Si verdaderamente creemos esto, ¡descanso, paz y gozo vendrán a nosotros! No
nos afligiremos al dejar ir ciertas cosas, ¡sabremos que hemos sido hecho
libres de ataduras! Diremos, “Señor, si tú me has quitado esto significa
que tienes algo mucho mejor para mi. Así que te lo doy- ¡lo puedes tener!”

Amado, ¡nosotros necesitamos decansar en la mano amorosa de nuestro Padre!
Debemos llegar al grado de confianza que nos permita decir, “Yo tengo un
Padre amoroso que desea lo mejor para mi. Él lo sabe todo!” ¿Cómo llegó
Job a un lugar de reposo? Él se persuadió a sí mismo de que Dios sabía lo
que estaba haciendo y que todo estaba bajo control. Job dijo “Mas él conoce
mi camino: si me prueba, saldré como el oro.” (Job 23:10).

Muchos cristianos ven a Dios obrar en sus vidas y aún se preguntan, “¿Qué
pasa si todo se derrumba? ¿Qué pasa si yo hago algo mal y Dios se enoja o
impacienta conmigo? ¿Acaso todas Sus promesas se alejarán de mi? ¿Acaso debo
prepararme para algo inferior a su perfecto plan?” No- ¡nunca! Si su corazón
es recto delante de Dios, si usted continúa acudiendo a Él y buscándole con
todo su corazón, ¡nada cambiará los planes de Dios hacia usted!

jueves, 10 de noviembre de 2011

LAS FLECHAS PENETRANTES DE LA SANTA VERDAD

Creo que Dios necesita hacer primeramente una obra en nosotros antes de que
podamos reclamar alguna promesa del pacto. ¿Cuál es esta obra de la que
dependen todas la demás? Jeremías nos dice: “...pondré mi temor en el
corazón de ellos, para que no se aparten de mí.” (Jeremías 32:40). La obra
de Dios precedente al pacto es poner temor en nuestros corazones a través del
Espíritu Santo.

Aquí, Jeremías está hablando de las provisiones de Dios en el nuevo pacto,
no del antiguo. Dios nos dice claramente cómo esta primera obra del pacto es
ejecutada: “Pondré mi temor en el corazón de ellos.” Él nos permite
saber que nosotros no tenemos que crear un temor santo a través de la
imposición de manos o de la lucha contra nuestra propia carne. No -el único
camino por el cual esta obra santa es lograda en nosotros depende de que el
Espíritu de Dios la lleve a cabo.

Dios nos dice a través de este pasaje, “Yo haré maravillosas cosas en tí.
Yo enviaré mi propio Espíritu para que habite en tí y te dé un nuevo
corazón. Él te dará el poder para humillar todas las acciones de la carne y
te guiará hacia una total libertad del dominio del pecado. Finalmente Él
causará en tí el querer como el hacer de mi buena voluntad."

“Pero existe una obra que el Espíritu debe realizar en tí antes que ninguna
otra. Él va a poner en tí un temor verdadero de Dios respecto al pecado. Él
implantará en tí un profundo asombro de mi santidad para que nunca te apartes
de mis mandamientos. De otra forma, tu pecado siempre te dominará.”

En suma, el Espíritu Santo cambia la forma en que vemos a nuestro pecado. Él
sabe que entre más continuemos tomando nuestra lujuria a la ligera, nunca
seremos libres. ¿Cómo hace esto el Espíritu Santo? A través de la
convicción que nos da la Palabra de Dios - las flechas penetrantes de la santa
verdad.

DAVID WILKERSON

miércoles, 9 de noviembre de 2011

PREPARESE PARA MORIR

Al formar el nuevo pacto, Dios se obligó a sí mismo a proveer todo el poder
posible y toda la fortaleza necesaria para cumplir cada condición y demanda
pertenecientes a este acuerdo. Por tanto, cuando Dios dice bajo juramento,
“Yo lo haré,” la fe en nosotros responde, “Que sea hecho.”

Permítame mostrarle una verdad maravillosa del nuevo pacto. Ésta indica que
el Señor nunca puede acercarse a Su pueblo y hacer que ellos se acerquen a Él
tanto como Él quisiera. Por tanto, Él nos une, nos envuelve, nos acerca a Él,
y Él a nosotros, a través de su pacto vinculante. El nuevo pacto se trata en
su totalidad del compromiso de nuestro Señor a guardar a Sus hijos de caer, de
consolarlos, de darles confort y confianza al saber que el poder y dominio del
pecado puede y será roto por el Espíritu Santo que habita en ellos.

Esta verdad es la única certeza que tienen aquellos creyentes que han perdido
la esperanza en su lucha contra ese pecado que los acosa. Solamente al tener
una revelación del nuevo pacto es que podremos aprender el secreto para
obtener victoria total sobre el pecado.

La muerte es el único camino para salir del viejo pacto y entrar al nuevo. La
fe carnal tiene que morir -no más esfuerzos para creer. Si voy a tener fe
-verdadera fe, la fe de Cristo- Él deberá dármela. Se nos ha dado una medida
de fe. Sin embargo, si es cierto que no puedo hacer nada por mí mismo, entonces
esto también incluye el tener Su fe. Por esta misma razón es que la Escritura
la llama “la fe de Cristo.”

¿Está usted cansado, enfermo de vivir en pecado? ¿Está usted verdaderamente
anhelando vivir una vida santa, libre del hábito de la lujuria carnal? Entonces
prepárese para morir. Alístese para abrazar la cruz. El antiguo pacto lo
traerá a un punto de desesperación -a la nada. Cuando usted haya renunciado a
toda esperanza de vencer su pecado con su propio poder y voluntad humana,
entonces usted se encontrará listo para entrar al reino glorioso de libertad a
través del nuevo pacto.

DAVID WILKERSON

martes, 8 de noviembre de 2011

EL AMOR DEL PADRE

A muchas personas les parece difícil ver a Dios como un padre amoroso. Éstas
no lo ven con claridad debido a dolorosas experiencias del pasado con su padre
o padrastro alejado de Dios.

Miles de cristianos no creen que Dios los ama porque su padre terrenal los
abandonó, hirió, y afligió terriblemente. ¡Yo oro para que este mensaje les
hable no solamente a estas personas sino también a aquéllos quienes no han
descubierto la profundidad del amor del Padre!

Muchos de nosotros conocemos las Escrituras y la teología detrás del gran
amor de Dios hacia sus hijos. Sin embargo, pocos hemos aprendido a apropiarnos
de ese amor y por consiguiente, no disfrutamos de los beneficios de contar con
él.

Escuche cómo Dios se describe a sí mismo frente a Moisés: “Dios fuerte,
misericordioso y piadoso; tardo para la ira y grande en misericordia y verdad,
que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el
pecado,...” (Éxodo 34:6-7).

Cuando nos encontramos en medio de nuestras tribulaciones, nos olvidamos de lo
que Dios ha dicho acerca de su propia naturaleza. Si solamente creyéramos en
Él en esos momentos, nosotros contaríamos con gran seguridad y confianza en
nuestras almas. De principio a fin, la Biblia expresa la voz de Dios,
revelándonos cuan tierno y amoroso Él es.

En todo tiempo, Él está listo para perdonarnos: “porque tú, Señor,eres
bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te
invocan.” (Salmo 86:5).

Él es paciente con nosotros, lleno de ternura y misericordia. “Muchas son
tus misericordias...” (Salmo 119:156). “Clemente y misericordioso es
Jehová, lento para la ira y grande en misericordia.” (Salmo 145:8).

Cuando usted acude al Señor en oración y adoración, sea muy cuidadoso acerca
de la imagen de Dios que usted tiene al entrar en Su presencia. ¡Usted debe
estar completamente convencido de Su amor por usted y crea que Él es todo lo
que Él dice que es!

DAVID WILKERSON

lunes, 7 de noviembre de 2011

SIRVIENDOLE AL SEÑOR CON GOZO

Dios desea que nosotros estemos verdaderamente convencidos de su tierno amor y
tan persuadidos de que Él está obrando para darnos lo mejor, que logremos
caminar con Él en continuo gozo. Moisés le advirtió a Israel, “Por cuanto
no serviste a Jehová, tu Dios, con alegría y con gozo de corazón, cuando
tenías abundancia de todas las cosas, servirás, por tanto, a tus enemigos que
enviará Jehová contra ti, con hambre, con sed y con desnudez, y con falta de
todas las cosas” (Deuteronomio 28:47-48).

Dios nos está diciendo hoy, “Alégrate y regocíjate en lo que Yo he hecho
por ti! Si andas murmurando y quejándote, serás un hambriento espiritual,
¡una presa fácil para tus enemigos!” Dios quiere que confiemos en su amor
por nosotros, ¡en que seremos testimonios alegres! Él quiere predicadores
alegres de corazón, llenos de júbilo fundamentado en la verdad.

Su verdad produce una riqueza de alegría que fluye naturalmente desde el
corazón: “Servid a Jehová con alegría; venid ante su presencia con
regocijo.” (Salmo 100:2). “Sacó a su pueblo con gozo; con júbilo a sus
escogidos.” (Salmo 105:43). “Alegraos en Jehová y gozaos, justos; ¡cantad
con júbilo todos vosotros los rectos de corazón!” (Salmo 32:11). “Mas los
justos se alegrarán; se gozarán delante de Dios y saltarán de alegría.”
(Salmo 68:3).

Usted puede preguntarse, “¿Por cuánto tiempo debo mantener el gozo en mi
servicio al Señor?” Muchos creen que éste permanece en la medida en que las
etapas de refrigerio vengan desde lo alto o mientras las cosas marchen bien. No,
¡debemos regocijarnos en todo tiempo! Esto es lo que la Biblia nos dice: “De
mañana sácianos de tu misericordia, y cantaremos y nos alegraremos todos
nuestros días.” (Salmo 90:14). “Mas os gozaréis y os alegraréis para
siempre en las cosas que yo he creado, porque he aquí que yo traigo a
Jerusalén alegría y a su pueblo gozo.” (Isaías 65:18). Nosotros somos
“la Jerusalén” -¡nacidos de nuevo y viviendo para Él con un espíritu de
júbilo y regocijo! Confíe en el Padre, crea en lo que dice su Palabra sobre
Él, y vea su júbilo derramado en su vida.

DAVID WILKERSON

viernes, 4 de noviembre de 2011

¡EL TRATO MISERICORDIOSO DE DIOS!

“... yo soy el padre de Israel, y Efraín es mi primogénito.”
(Jeremías31:9).

El pueblo de Efraín, la tribu más grande de Israel, era la más cercana al
corazón de Dios. El Señor tenía un plan eterno para esta bendecida tribu,
pero Efraín continuó actuando en rebeldía y afligiendo a Dios. ¡Este pueblo
pecó más que ningún otro en Israel! Pero, ¿acaso Dios abandonó a Efraín?
Por el contrario, el Señor dijo que ¡este pueblo sería libre y rescatado!
Ellos vivirían en la abundancia, es decir, bajo las grandes bendiciones de
Dios (ver Jeremías 31:14 RV, 1995).

¿Qué vió Dios en Efraín? Ellos tenían un corazón arrepentido
-avergonzados de su pecado y deseosos de regresar con su Señor. Y, a pesar de
todas sus fallas, ¡esta actitud atrajo el corazón de Dios! Cuando una fuerte
palabra profética vino a Efraín, ellos respondieron al ser reprendidos y
lloraron ante su pecado.

Frente al grado de su rebeldía, Dios dijo, “¿No es Efraín un hijo precioso
para mí? ¿No es un niño en quien me deleito? Desde que hablé de él, lo he
recordado constantemente. Por eso mis entrañas se conmovieron por él, y
ciertamente tendré de él misericordia...” (Jeremías 31:20). Dios estaba
diciendo, “A pesar de las debilidades y fallas de Efraín, veo su espíritu
arrepentido y no apartaré de él mi amor. ¡Mi propósito eterno para Efraín
continuará como lo había planeado!”

Amado, ¡Dios tiene un plan para su vida! Él cumplirá Sus propósitos en
usted, no importa lo que usted esté pasando o cuan severa sea su prueba.
¡Dios ha puesto mucho esfuerzo en la planeación de su futuro!

Yo tengo una palabra profética para algunos que están leyendo este mensaje
ahora: usted no puede juzgar el propósito eterno de Dios hacia usted basado en
lo que siente y piensa. Dios quiere decirle, “Haz que tu corazón se humille
delante de mí. Confía en mi Palabra acerca de mi naturaleza - yo soy un Padre
tierno y amoroso, y quien ha invertido mucho en tí y no voy a dejarte ir. Tú
eres mi deleite y te libraré!”

“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová,
pensamientos de paz y no de mal, para daros el fin que esperáis.” (Jeremías
29:11).

DAVID WILKERSON

jueves, 3 de noviembre de 2011

PALABRAS POCO CUIDADOSAS


“Pero yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella
darán cuenta en el día del juicio, pues por tus palabras serás justificado,
y por tus palabras serás condenado” (Mateo 12:36-37).

A veces parece que pensamos que las palabras que pronunciamos simplemente caen
al vacío y mueren, o se desvanecen en el aire, o se convierten en nada. Pero,
¡no! Nuestras palabras perduran - ¡ellas no mueren!

Usted puede decir, “Pero yo solamente dije este chisme a un amigo y él
prometió no mencionárselo a nadie. Con él terminó.” No, ¡eso no
sucederá! Cada palabra que usted y yo pronunciamos está grabada, escrita en
la eternidad, y nosotros las escucharemos todas repetirse en el día del
juicio.

Recuerdo haber experimentado una profunda convicción tras una conversación
con un amigo acerca de un chisme. Lo que dije fue cierto. Se trataba de una
situación moral que tuve que manejar referente a un ministro. Su nombre fue
pronunciado en la conversación y yo dije, “No confíes en él. ¡Yo sé algo
acerca de él!”

En el momento en que yo pronuncié eso, me sentí condenado. El Espíritu Santo
me susurró al oído, “¡Para aquí! Nadie necesita saber de esto. No digas
más porque no hay ningún propósito detrás. A pesar de que es verdad, ¡no
lo repitas!”

Lo que yo había dicho era ya suficientemente negativo. Pero cuando saqué
todos los detalles, yo supe que ¡debí de haberme quedado callado! Me
encontraba profundamente convencido por el Espíritu Santo. Así que más tarde
le hablé a mi amigo y le dije, “Lo siento, fue un chisme. Estaba fuera de
control. Por favor no lo repitas. Intenta no pensar al respecto.”

¿Acaso mi pecado es cubierto por la sangre de Jesús? Sí, porque yo reconozco
completamente que he pecado y le he permitido al Espíritu Santo mostrarme parte
del orgullo legalista que aún habita en mi. ¡Le permití que me humillara y me
sanara! Hoy, cada vez que voy a decir algo en contra de alguien, obedezco al
Espíritu Santo en cuanto lo escucho decirme alto y claramente,
“¡Detenté!”

DAVID WILKERSON

miércoles, 2 de noviembre de 2011

DOS CLASES DE AMOR



El Padre expresa dos clases de amor: un amor generalizado hacia todos los
pecadores, y un amor especial hacia todos aquellos que forman parte de Su
familia. El amor generalizado de Dios hacia la humanidad puede ser adoptado por
todo individuo que acude a Él en arrepentimiento. Pero el corazón de Dios
también está lleno de otro tipo de amor - ¡distinto, excepcional amor por
Sus hijos!

Dios siempre ha tenido a un pueblo elegido y en el cual Él ha derramado Su
gran amor. Israel fue objeto de ese amor especial: “Porque tú eres pueblo
santo para Jehová, tu Dios; Jehová, tu Dios, te ha escogido para que le seas
un pueblo especial, más que todos los pueblos que están sobre la tierra. No
por ser vosotros el más numeroso de todos los pueblos os ha querido Jehová y
os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los
pueblos, sino porque Jehová os amó...por eso os ha sacado Jehová con mano
poderosa...” (Deuteronomio 7:6-8).

Dios le dirigió estas palabras a Israel. Sin embargo, si usted ha recibido a
Jesús como su Señor y Salvador -si usted ha sido adoptado en la familia de
Dios y Él es su Padre amoroso - ¡usted se ha dado cuenta de cuan especial es
usted para Él! Usted es recipiente del extraordinario amor de Dios. He aquí
Sus palabras dirigidas hacia usted:

“Pero vosotros sois linaje escogido,real sacerdocio, nación santa,pueblo
adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de
las tinieblas a su luz admirable. Vosotros que en otro tiempo no erais pueblo,
ahora sois pueblo de Dios; en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia,
ahora habéis alcanzado misericordia.” (1 Pedro 2: 9-10).

En algún momento usted no había sido objeto de Su amor especial, ¡pero ahora
lo es! Usted ha sido reconciliado con el Padre y Él le ama profundamente
-¡ahora mismo, en este preciso instante!
 
DAVID WILKERSON

martes, 1 de noviembre de 2011

HUESOS SECOS PUEDEN REVIVIR!



Ezequiel 37 habla sobre el deseo de Dios de que tomemos las promesas de Su
nuevo pacto -de que aprendamos a vivir verdaderamente al entrar a la bendición
de su pacto.

Todos hemos escuchado la historia de los “huesos secos” a los que hace
referencia Ezequiel. Es importante notar que esas vasijas sin vida se
encontraban bajo el pacto. Usted puede ver que el Señor les dice “¡Huesos
secos, oíd palabra de Jehová! ” (Ezequiel 37:4). Ellos habían escuchado la
promesa del pacto de Dios: “Yo hago entrar espíritu en vosotros, y
viviréis.”

Pero, a pesar de que estos huesos secos habían escuchado sobre la promesa del
nuevo pacto, ellos no habían entrado al disfrute de sus bendiciones. Muchos
creyentes hoy en día saben del nuevo pacto de Dios- sin embargo, ellos
difícilmente pueden creerlo, pues éste suena demasiado bueno para ser verdad.
Ellos dicen, “ Yo sé que Dios nos ha dado su Espíritu Santo para que habite
en nosotros. Yo sé que el Espíritu provoca en nosotros la obediencia a
Cristo. ¡Yo anhelo grandemente esta bendición pero cómo puedo obtenerla para
mi vida!”

Existe algo que debemos hacer. Ezequiel escribe que Dios le dió esta
profecía, “ ...así ha dicho Jehová, el Señor: "¡Espíritu, ven de los
cuatro vientos y sopla sobre estos muertos, y vivirán!” (37:9). Entonces
Ezequiel menciona que profetizó tal como Dios le había ordenado, “y entró
espíritu en ellos, y vivieron y se pusieron en pie.¡Era un ejército grande
en extremo!” (37:10).

Repentinamente, ¡un gran ejército vivo se paró delante de Ezequiel! El
Espíritu Santo había llenado de vida a todos aquellos cuerpos muertos - y
ahora ellos estaban preparados para la batalla. En un instante, ellos habían
entrado al pleno disfrute y bendiciones del nuevo pacto. El Espíritu de Dios
había tomado Su legítimo lugar en ellos -y Él estaba haciendo realidad todos
los cambios prometidos.

DAVID WILKERSON







lunes, 31 de octubre de 2011

DIOS NUNCA SE RINDE



“¿Qué hombre de vosotros, si tiene cien ovejas y se le pierde una de ellas,
no deja las noventa y nueve en el desierto y va tras la que se perdió, hasta
encontrarla?” (Lucas 15:4).

Aquí, Jesús está hablando de la oveja que ha estado en el redil. Claramente,
ésta representa a un miembro del rebaño de Cristo, a alguien que ha sido bien
alimentado y guiado por un pastor amoroso. Sin embargo, esta oveja se ha
perdido y por lo tanto, el pastor ha salido a buscarla.

Observe lo que Jesús dice allí sobre el pastor: “Él va por aquélla que
está perdida hasta que la encuentra.” Dios nunca se da por vencido con nadie
que le ha pertenecido y que se ha descarriado. En su lugar, Él sale a buscar a
esa oveja, la abraza y la trae de regreso a su rebaño.

En otras palabras, usted puede caer tan lejos en su pecado que incluso llega a
tocar el borde del infierno, y Él aún lo buscará, lo perseguirá. David
testifica, “Si subiera a los cielos, allí estás tú; y si en el seol
hiciera mi estrado, allí tú estás” (Salmo 139:8).

Nosotros hemos escuchado la expresión “el infierno aquí en la tierra”.
Esta es la vida de aquéllos que han huido de Dios. Su “cama en el
infierno” es una condición terrible. Ésta implica ser cautivo del pecado,
alejarse tan lejos del Señor que usted eventualmente cae en un “sueño”
sin vida. Este “sueño” es acompañado por un miedo persistente que le
suspira, “usted está yendo directamente al infierno. Usted posiblemente
nunca regresará a Dios”.

El mensaje de Cristo para nosotros es, “Tú tendrás tu cama en el infierno,
pero no estás tan sumergido en tu pecado que yo no pueda alcanzarte y
recibirte en mis brazos.”

Cuando el pastor encuentra al perdido, él carga a la criatura herida hasta su
casa. Después él reúne a todos sus amigos y vecinos, y les dice, "Gozaos
conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido"(Lucas 15:6).

“Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se
arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de
arrepentimiento.” (Lucas 15:7).
 
DAVID WILKERSON

viernes, 28 de octubre de 2011

LA CATASTROFE

Un científico declaró lo siguiente acerca de la catástrofe: “El mundo entero fue agitado.” Otro exclamó: “Fue el desastre natural más devastador en la historia del mundo.” Ellos estaban describiendo al temblor debajo de las aguas que afectó por completo las costas de Asia hace unos años. Miles de personas fallecieron. Aún continuamos presenciando calamidades a nuestro alrededor. Cuando eventos terribles acontecen, yo voy con el Padre y le pregunto: “Señor, ¿de qué se trata todo esto? ¿fue ésto simplemente un accidente inexplicable de la naturaleza, o existe algo más que deseas que tu pueblo entienda?” Nosotros lamentamos el dolor indescriptible y la pena que aquejó a multitudes. Oramos constantemente por las víctimas. Nuestro ministerio ha enviado miles de dólares a través de agencias cristianas de restate para ayudar a reconstruir iglesias y casas en zonas devastadas. La Escritura nos dice que nuestro Padre celestial es movido por los sentimientos de las personas en agonía y que el Espíritu Santo derrama consuelo a todos los creyentes de las naciones afectadas. América es una nación compasiva y generosa. Doy gracias a Dios por la respuesta de muchos de orar, donar e ir a aquellas áreas para brindar auxilio. Pero hay algo más profundo que aqueja mi alma. La magnitud de los desastres no terminan por afectarnos. Parece que estamos adormecidos y estupefactos ante todo lo que sucede a nuestro alrededor. Le doy gracias a Dios por los buenos reportes que he recibido acerca de las bendiciones derramadas en muchas partes del mundo, incluyendo a América. Pero si no podemos postrarnos de rodillass por el poder desatado -si no podemos humillarnos tras haber testificado un horrible desastre natural- ¿qué necesita ocurrir para silenciar a los burladores de Dios? ¿somos aprueba de calamidades, de eventos sorprendentes? Medite en esto: * La expulsión de Dios de nuestra sociedad en nombre de una política correcta. * El mundo entero se está convirtiendo al secularismo y materialismo. * Una iglesia que está creciendo más en su mundanidad que el mundo en sí mismo. * El incremento de violencia y apatía. * La Biblia no es aceptada más como la Palabra de Dios. * El día en que “todo lo que puede ser movido” es movido. * Cuando la gente que está alerta tiene la intuición de que “alguien está jugando con la naturaleza, de que algo está sucediendo y no puede ser explicado.” * Cuando la sociedad continúa haciendo de lo suyo sin hacer ninguna “Pausa ante Dios,”sin detenerse a pensar si Dios será burlado. Cuando estas cosas suceden significa que nos hemos acercado o cruzado la línea del estupor espiritual donde ninguna porción de misericordia divina puede ser despertada. Dios es misericordioso, tiene gracia para con nosotros y está listo para perdonar. Deje que Jesús manifieste Su amor y compasión a través de Sus discípulos, conforme la venida del Señor se acerca.

DAVID WILKERSON

jueves, 27 de octubre de 2011

PENSAMIENTOS SOBRE EL AMOR Y LA FE

Permítame compartir algunos pensamientos de gran sanidad acerca de la fe y el
amor. Creo que Dios hace milagros en respuesta a oraciones hechas con fe. Creo
en cada promesa de la Palabra de Dios. Pero, a través de mucho sufrimiento y
lágrimas, yo he descubierto algo maravilloso acerca de la forma en que Dios
trabaja. Lo que usted va a leer, le ayudará a recobrar su confianza en el
Señor y le ayudará a librarlo de la intención esclava por entender el
significado de la fe.

Estas son mis conclusiones:

* Si usted no puede darle al Señor perfecta fe, entonces dele perfecto amor.
“El perfecto amor echa fuera el temor.” El perfecto amor es el reposo que le
da el Señor a su pueblo. El Señor quiere que reposemos en Su amor, confiando
en que Él siempre acudirá a ayudarnos a pesar de nuestra fe inadecuada, de la
misma manera en que un padre auxilia a su hijo herido.

Pare de evaluar o calificar su grado de fe. Deje de intentar comprender la fe.
La Biblia dice, “Ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor,estos tres;
pero el mayor de ellos es el amor.” (1 Corintios 13:13). Si usted se va a
especializar en algo, especialícese en el amor -la fe funciona a través del
amor.

* Si Dios no contesta algunas de sus oraciones, podemos estar seguros de que
Él tiene una gran razón eterna para no hacerlo.

Lo anterior se resume en lo siguiente: Dios tiene todo el poder y puede hacer
cualquier cosa. Nada es imposible para Él. Dios ha prometido contestar toda
oración en el nombre de Cristo, así que debemos pedir con plena confianza en
nuestra fe, esperando una respuesta. Sin embargo, Dios puede retardar la
respuesta o escoger otro camino para nosotros pues tiene una razón poderosa
para hacerlo. Y debemos creer que todo lo que Dios permita en nuestras vidas
ayudará a nuestro bien. (Romanos 8:28).

Nuestro Padre celestial sabe exactamente hacia dónde nos dirigimos y lo que
necesitamos. Él nos dará lo mejor, en su tiempo divino. (Mateo 7:11).

Dios no permitirá que usted sea vencido por sus tribulaciones. Con base a su
propio criterio, usted ha llegado a su punto límite, sin embargo usted
sobrevivirá y vivirá para hablar de Su fidelidad, si antes usted no endurece
su corazón sino que se dejar caer en los brazos de Dios, confiando en Su amor
eterno.

DAVID WILKERSON

miércoles, 26 de octubre de 2011

ALGUIEN ME CONOCE

“Jehová, tú me has examinado y conocido.” (Salmo 139:1).

Nadie me conoce
Más que Dios.
Él conoce mis pensamientos más profundos.
Pues aún no está la palabra en mi lengua
y ya tú, Jehová, la sabes toda.
Detrás y delante me rodeaste,
y sobre mí pusiste tu mano.
Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí;
¡alto es, no lo puedo comprender!
En ocasiones las tinieblas me cubren
Pero Él examina mi corazón
Lo conoce
Él conoce mis caminos malvados.
Solamente Su sabiduría
Puede comprenderlos
Cuando clamo a Él
Él responde
Y me fortalece con vigor
En mi alma
¡Lo mismo te son las tinieblas que la luz!
Él conoce mis tinieblas y me dará luz.
Él me conoce.

DAVID WILKERSON

martes, 25 de octubre de 2011

UN DIA NO MUY LEJANO

Cuando mi vida llegue a su fin en esta tierra,veré al que
que ame sin haberle visto.
Estaré frente a El Padre, El hijo ,El Espíritu Santo,el ejercito
celestial, y los hermanos que me precedieron.
En una gran pantalla ser podrá ver mi vida, donde se mostraran
detalles ínfimos, aún las intenciones de mi corazón.
Seguramente se me declara culpable, lagrimas brotaran de mis ojos.
En ese mismo instante la pantalla se iluminará otra vez , se
pasará la escena ocurrida en el gòlgota.
Jesús , me mirará con ojos compasivos,me sonreirá , mis lagrimas
cesaran ,El Padre dirá : Justificada !
todos los allí presentes, prorrumpieran en aplausos y gritos de
Jubilo!


MI ALMA ENGRANDECE AL SEÑOR
Y MI ESPÍRITU SE REGOCIJA EN DIOS MI SALVADOR
PORQUE HA MIRADO LA BAJEZA DE SU SIERVA

LUCAS 1 : 46

viernes, 21 de octubre de 2011

¡LLENOS DE ESPERANZA, GOZO Y PAZ!

Si usted desea que la paz de Dios gobierne en su vida, usted tiene que
renunciar a ciertas cosas:

* Usted debe de renunciar a tratar de imaginarse cómo Dios obrará en
su situación.
* Usted debe renunciar a la preocupación e inquietud: “Por nada
estés angustiados...” (Filipenses 4:6).
* Usted debe renunciar a decirle a Dios cómo Él puede suplir su
necesidad.
* Y sobre todo, usted debe renunciar a considerarse un fracaso. ¡Deje
de pensar que usted no agrada a Dios!

Una de las trampas más efectivas de Satanás para robarle a los cristianos su
paz es convencerlos de que ellos deben de luchar en su carne para agradar a
Dios. ¡Satanás utiliza contra mí esta arma todo el tiempo!

En algunas ocasiones, cuando necesito un lugar tranquilo para orar, me meto a
mi auto y manejo hacia un lugar retirado. Allí, puedo alabar al Señor y
disfrutar de Su presencia mientras observo los verdes campos y bosques. ¡Pero
a veces golpea a mi mente el pensamiento de que no estoy haciendo nada para el
Señor!

Y oro, “Señor, no estoy alcanzando nada para Tu reino. Todo lo que hago es
orar, preparar sermones, e ir a la igleisa y predicar. El mundo entero se está
yendo al infierno y yo no estoy haciendo nada para Ti! ”

¿Han estos pensamientos golpeado su mente? Usted hace todo lo que puede para
agradar a Dios, sin embargo aún no se siente santo. Yo rara vez me siento
santo. Esto es cierto hasta en mis mejores momentos - ¡inclusive cuando estoy
predicando bajo la unción del Espíritu!

Usted se pregunta, “¿Usted, hermano David? ¿Usted siente que a veces no
hace nada para Dios?” ¡Sí! El diablo viene a mí y me hace sentir indigno,
insatisfecho. ¡Al dar lugar a horribles sentimientos perdemos nuestra paz!

Escuche la oración de Pablo por nosotros: “Y el Dios de la esperanza os
llene de todo gozo y paz en la fe, para que abundéis en esperanza por el poder
del Espíritu Santo.” (Romanos 15:13).

Confíe en su bondad. Crea en Su amor y misericordia. No lo acuse de estar
enojado o desilusionado con usted, o de que no le hable. ¡Deje que Su paz
gobierne en su corazón y sobre toda su vida!


DAVID WILKERSON

martes, 18 de octubre de 2011

DIOS DESCRIBE SU AMOR POR SU PUEBLO

Dios mismo se describe de esta manera: “Con todo, yo enseñaba a andar a
Efraín, tomándolo por los brazos; más ellos no comprendieron que yo los
cuidaba.” (Oseas 11:3).

En el lenguage original este versículo dice, “Yo vine a ellos en su
desesperación y tiernamente los cuidé en medio de lugares contaminados y
escabrosos. ¡Los sostuve en mis brazos y los cuidé!” Pero Oseas dice en
11:7, “Mi pueblo está aferrado a la rebelión contra mí.” La palabra
aferrado significa “colgado en suspenso, colgado en duda.”

Israel no estaba seguro del amor de Dios y de su ternura. Y lo que Dios le
estaba diciendo a Oseas era: “Mi pueblo está dudando de mi amor por ellos.
Ellos realmente no me conocen. ¡Ellos están inseguros de mi amor!”

¡Era verdad! Israel no podía creer que Dios aún los amara. Ellos eran
idólatras, rebeldes y escépticos, y posiblemente estaban pensando: “Hemos
traído hacia nosotros el desagrado del Señor. Hemos pecado voluntariamente,
Él seguramente nos juzagará!” Pero Dios dijo, “¿Cómo podré
abandonarte, Efraín?... Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda
mi compasión.” (v. 8).

Escuche Sus palabras de confort y sanidad hacia usted:

“Porque no contenderé para siempre, ni por siempre estaré enojado, pues
decaerían ante mí el espíritu y las almas que yo he creado.” (Isaías
57:16). El Señor está diciendo, “Si todo lo que ustedes pudieran ver fuera
mi coraje, su espíritu fallaría porque sería algo muy abrumador.”

“Por la iniquidad de su codicia me enojé y lo herí, escondí mi rostro y me
indigné; pero él, rebelde,siguió por el camino de su corazón. He visto sus
caminos,pero lo sanaré y lo pastorearé;

le daré consuelo a él y a sus enlutados.” (vv. 17-18). ¿Acaso esto expone
que Dios se da por vencido con su pueblo cuando éste falla?

Usted posiblemente esté pasando por aguas profundas. No me refiero
necesariamente a tentaciones o tribulaciones. Estoy hablando de sucesos
abrumadores que lo están afectando y que usted no puede entender. Vientos y
mares de todo tipo inundándolo, cosas más allá de su comprensión.
Situaciones que están afectando su hogar, su iglesia, su trabajo, todo. ¡Pero
Dios quiere cuidarlo en medio de todo esto! ¡Él quiere llevarlo a una sanidad
espiritual! ¡Si todo lo que usted puede creer en estos momentos es que Él le
ama a pesar de sus necios caminos, que Él le ruega que vea su divino cuidado,
entonces esto es suficiente!


DAVID WILKERSON

lunes, 17 de octubre de 2011

EN TIERRA SECA

Dios nos insiste que debe de haber “tierra seca” en nuestro paso por el Mar
Rojo. Él le dijo a Israel, “Y tú, alza tu vara, extiende tu mano sobre el
mar y divídelo, para que los hijos de Israel pasen por medio del mar en
seco.” (Éxodo 14:16). Maravillosamente, Dios utiliza esta frase cuatro veces
para decirle a su pueblo, “Ustedes cruzarán por tierra seca.” Nosotros
encontramos esta frase cuando Israel estaba a punto de entrar a Canaán. Ellos
cruzaron el Jordán por tierra seca en su camino a la Tierra Prometida.

En otras palabras, tierra seca es un camino. Y si usted está en ella, entonces
se encuentra dirigiéndose hacia a algún lugar. Usted no está perdiendo
terreno o está yendo de regreso. Su tierra seca es el plan del Señor, Su obra
en su vida, los milagros que Él hará. Usted está caminando hacia una
revelación, hacia una nueva victoria en Cristo, hacia algo mayor.

La Escritura testifica lo anterior. Observe cuando faraón y su ejército
perdieron la batalla: en tierra seca provista por Dios. La tierra seca es el
lugar exacto donde el diablo vendrá tras usted. Él quiere atacarlo cuando
usted se encuentra en su punto más débil. Sin embargo, es en la misma tierra
seca donde el Señor se deshace de “las ruedas de los carros de
caballería” de los principados y potestades de Satanás: “pues al volver
las aguas, cubrieron los carros, la caballería y todo el ejército del faraón
que había entrado tras ellos en el mar; no quedó ni uno de ellos.” (Éxodo
14:28).

En esencia, aquí Dios nos está diciendo: “Quiero que aprendas a caminar en
fe - no conforme a una visión o a una voz, sino cuando estás en medio de un
periodo de sequía. Quiero que estés seguro que cuando no puedes escuchar Mi
voz o ver hacia adelante -cuando te encuentres en tierra seca- sepas que yo te
estoy dirigiendo hacia un lugar. ”

El Señor promete que Él convertirá nuestra tierra seca en manantiales de
agua viva: “Los afligidos y necesitados buscan las aguas, pero no las
encuentran;seca está de sed su lengua. Yo, Jehová, los oiré...abriré en el
desierto estanques de aguas. y manantiales de aguas en la tierra seca”
(Isaías 41:17-18).

Querido santo, ¿está usted seco? Dios le está diciendo, “Pronto verás la
cosecha. Donde antes había tierra seca, vida emanará a tus pies.¡Y yo la he
creado! Estate firme y ve lo que haré para ti en tierra seca.”

DAVID WILKERSON

jueves, 13 de octubre de 2011

Y LA PAZ DE DIOS GOBIERNE

“Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis
llamados en un solo cuerpo. Y sed agradecidos.” (Colosenses 3:15)

Este versículo contiene un mandato increíble: ¡Dios llama a su cuerpo en
Cristo Jesús a permitirle que Su paz gobierne en sus corazones, mentes y
cuerpos! La paz de Dios tiene que ser el árbitro de nuestras vidas,
estableciéndose sobre todo. Si alguna vez ha habido un tiempo en el que este
llamado necesita ser escuchado es hoy, ¡en este tiempo de agitación y
confusión!

¿Por qué el Señor le pide a su primera iglesia que permita que Su paz
gobierne en sus vidas? Ello se debe a que Él sabía lo que vendría y quería
prepararlos! En tan solo pocos años, gran agitación vendría sobre ellos.
Éstos serían torturados y perseguidos. Enfrentarían tiempos difíciles,
perderían sus hogares, sus bienes terrenales serían confiscados, inclusive
sufrirían ataques de hombres viciosos quienes pensaron que le harían a Dios
un favor aniquilándolos. Dios los estaba previniendo, preprarando,
“¡Ustedes tienen que ser cimentados en Mi paz porque solamente ésta les
permitirá enfrentar los cambios que vienen!”

“Lo que aprendisteis, recibisteis, oísteis y visteis en mí, esto haced; y
el Dios de paz estará con vosotros.” (Filipenses 4:9).

Actualmente existe una paz falsa en muchas iglesias. Una paz que fallará en
los días venideros. ¡Esta es la paz que tienen los cristianos necios y ciegos
del pecado! Moisés llamó a esos creyentes “auto-bendecidos”, queriendo
decir, “auto-engañados.” Él le advirtió a Israel de la maldición que
caería sobre los malvados e hijos desobedientes de Dios que caminaron en
idolatría. Él les dijo que serían cubiertos sobre su pecado con un falso
sentido de paz: “y después de oir las palabras de esta maldición, él se
congratule en su corazón, diciendo: "Tendré paz, aunque ande en la dureza de
mi corazón, puesto que con la embriaguez se aplaca la sed. " (Deuteronomio
29:19).

¡Moisés estaba describiendo al hijo de Dios que decide satisfacer su lujuria
por la maldad! Este creyente encuentra una doctrina cómoda que le dice que
está bien, que es salvo, y que está atado al cielo, mientras continúa en
pecado. Él se dice a sí mismo, “Haré como me plazca y aún no perderé la
paz en mi corazón.”

No importa lo que le suceda a América o a las naciones del mundo, ¡no hay
poder en el infierno que pueda robar la paz de Dios a través de Jesucristo, y
la cual es implatada en nuestra alma! Dios tendrá a su gente gobernada por su
paz. “Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones.”


DAVID WILKERSON

miércoles, 12 de octubre de 2011

LA CURA PARA LA INCREDULIDAD

Busqué en mis libros de referencias y encontré una lista de pasos para
“curar¨la incredulidad, pero ninguno de esas docenas de opciones me
convenció. Por tanto le pedí a Dios por algo sencillo y Él me dió dos ideas
para quitar la incredulidad del corazón:

1. Toma toda preocupación, temor y carga, y entrégaselas todas a Jesús.
¡Déjalas en Sus hombros!

“Echad toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
(1 Pedro 5:7).

Amado, ésta es la invitación personal de Dios para usted. Su petición es:
“¡Deposita todo en Mí! No cargues más. ¡Yo tengo cuidado de todo lo que
estás pasando y soy suficientemente grande para tomar todo lo que hay en
tí!”

No hace mucho tiempo, alguien en una situación extremadamente estresante me
llamó pidiéndome una palabra de exhortación. Pero ese día yo me encontraba
abrumado por muchos problemas, así que no podía sobrellevar uno más. Por
tanto, le contesté, “Lo siento, pero me tendrás que llamar en otro momento.
Estoy sobrecargado.” Gracias a Dios que ¡Él nunca está estresado! ¡Nunca
está abrumado! ¡Sus hombros pueden tomar todas las cargas de Sus hijos! ¡Él
nos llama a “depositar todo en Él!”

“Echa sobre Jehová tu carga y él te sostendrá; no dejará para siempre
caído al justo.” (Salmo 55:22). Revisa tu lista ahora mismo: “Dios, te doy
esto, y eso, y aquéllo. Te doy esta carga, esta dificultad, esta relación,
este problema.” ¡Esté convencido de qué Él tiene cuidado de usted!

2. Lánzece con total fe en la Palabra escrita de Dios. ¡Tome el reto del
Señor de vivir por Su Palabra!

“No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca
de Dios" (Mateo 4:4). Usted debe ser capaz de decir, “¡Voy a vivir y a morir
por la palabra de Dios en mí!”

Le pregunto a usted: ¿Cómo es que nosotros podemos confiar en Su Palabra para
nuestra salvación eterna y no para nuestras necesidades y problemas diarios?
Nosotros podemos creerle en la parte más difícil. ¿Por qué nos resulta más
complicado creer por ayuda, guianza y poder sobre el pecado? “A aquel que es
poderoso para guardaros sin caída y presentaros sin mancha delante de su
gloria con gran alegría” (Judas 24). Dios le ha prometido esto a usted. Así
que ¡deje a un lado las cargas que le están agobiando! Acuda al Señor y rete
Su Palabra. ¡Dígale que usted se jugará su vida en Su Palabra! ¡Muéstrele
cómo usted confía en cada una de Sus palabras- y será bendecido!

DAVID WILKERSON

martes, 11 de octubre de 2011

¡LA INCREDULIDAD EXPONE A DIOS COMO MENTIROSO!

“El que cree en el Hijo de Dios tiene el testimonio en sí mismo; el que no
cree a Dios, lo ha hecho mentiroso, porque no ha creído en el testimonio que
Dios ha dado acerca de su Hijo.” (1 Juan 5:10).

Considere todos los terribles pecados de Israel cometidos en el desierto,
murmuraciones, reclamos, idolatría, ingratitud, rebelión, sensualidad. Sin
embargo ninguno de ellos provocó la ira de Dios. ¡Fue su incredulidad la que
enojó a Dios! “Y Jehová dijo a Moisés: ¿Hasta cuándo me ha de irritar
este pueblo? ¿Hasta cuándo no me creerán, con todas las señales que he
hecho en medio de ellos?” (Números 14:11).

Dios le dijo a Moisés, “Este pueblo crea mentiras después de todo lo que he
hecho por ellos! He realizado milagros tras milagros, los he librado vez tras
vez. ¿Cuándo finalmente confiarán y descansarán en mí?”

Deténgase por un momento y medite en todas las cosas que Dios ha hecho por
usted: Él lo ha guardado, ha contestado oración tras oración. Él lo ha
acompañado en todas sus crisis. Él lo ha sacado de todas sus pruebas, lo ha
alimentado con maná del cielo, ha hecho por usted cosas que van más allá de
milagros.

Durante 38 largos años, Israel olvidó la Palabra de Dios y sus milagros. Y
debido a que cayeron en murmuraciones e incredulidad, Dios exclamó, “...los
heriré de mortandad y los destruiré...” (v. 12). Él le dijo a Moisés,
“¡Me rindo con mi pueblo porque éste nunca llegará a confiar en mi!”
Cuando Israel se encontraba en el lado victorioso del Jordán, Moisés hizo una
declaración solemne: “Mira, Jehová, tu Dios, te ha entregado la tierra: sube
y toma posesión de ella, como Jehová, el Dios de tus padres, te ha dicho. No
temas ni desmayes...No temáis ni tengáis miedo de ellos. Jehová, vuestro
Dios, el cual va delante de vosotros, peleará por vosotros....Pero ni aun así
creísteis a Jehová, vuestro Dios...Cuando Jehová oyó la voz de vuestras
palabras, se enojó e hizo este juramento: "Ni un solo hombre de esta mala
generación verá la buena tierra que juré que había de dar a vuestros
padres..." (Deuteronomio 1:21, 29-30,32, 34-35).

Dios magnifica Su Palabra por encima de Su nombre. Él ejecuta cada palabra que
pronuncia, y todas las cosas que le dijo a Irael son las mismas cosas que nos
dice a nosotros. Yo te pregunto: ¿acaso no incurriremos en Su ira si actuamos
con incredulidad?

Leemos Su Palabra y escuchamos todas Sus promesas desde el púlpito pero
después nos paramos en un rincón y nos preocupammos porque no los vemos
actuar inmediatamente como quisiéramos. Cuando no permitimos que su Palabra se
ancle a nuestras almas, cuando escuchamos sus preciadas promesas y después
actuamos como si hubiéramos sido abandonados, ¡exponemos a Dios como
mentiroso!

viernes, 7 de octubre de 2011

EL ABRIRA LAS VENTANAS

El Nuevo Testamento está lleno de promesas que muestran cuánto Dios ama
responder sobre abundantemente a las oraciones de Su pueblo.

Una de las promesas más conocidas es la de Efesios 3:20. Todos la conocemos
bien sin embargo pocos vivimos como si creyéramos en ella. “Y a Aquel que es
poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos
o entendemos, según el poder que actúa en nosotros.”

Dios es capaz de responder a nuestras oraciones pero ¡Él quiere hacer algo
por nosotros que va más allá de lo que podemos imaginar! Él quiere contestar
no conforme a nuestras peticiones endebles sino con base en Sus riquezas y
poderío.

La Biblia nos dice que Él es proclive a contestarnos en abundancia: “Dad y
se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro
regazo...” (Lucas 6:38).

“Antes bien, como está escrito: «Cosas que ojo no vio ni oído oyó ni han
subido al corazón del hombre, son las que Dios ha preparado para los que lo
aman». Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu...” (1
Corintios 2:9-10).

“...por medio de estas cosas nos ha dado preciosas y grandísimas promesas,
para que por ellas lleguéis a ser participantes de la naturaleza
divina,habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de las
pasiones.” (2 Pedro 1:4).

“[Confía]... en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para
que las disfrutemos.” (1 Timoteo 6:17).

¡Dios está prácticamente suplicándonos que le pidamos grandes cosas!

A nosotros nos gusta llamarle a nuestro Señor “nuestro Rey” pero
¿realizamos oraciones a la medida de la grandeza de nuestro Rey? Un rey tiene
la obligación de cuidad a sus súbditos, y su gente lo honra al pedirle
extensivamente, creyendo que él tiene todo lo que ellos necesitan y que él
les proverá abundantemente. Amado, ¡usted no puede llamar a Dios “rey” y
después acusarlo de permitir que uno de sus súbidtos siga en necesidad!

¿Ha usted avergonzado a Dios con sus peticiones endebles? “Probadme ahora en
esto, dice Jehová de los ejércitos, a ver si no os abro las ventanas de los
cielos y derramo sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.”
(Malaquías 3:10).


DAVID WILKERSON

jueves, 6 de octubre de 2011

VICTORIA TOTAL

“Los hijos de Amón pasaron el Jordán para hacer también guerra contra
Judá, contra Benjamín y contra la casa de Efraín, y sufrió Israel gran
aflicción.” (Jueces 10:9)

Amón había sido utilizado por Dios para corregir los pecados de Israel (ver
Jueces 10:6-8). ¡Y ahora su ejército esta marchando hacia Israel! El pueblo
de Dios estaba perplejo y decaído, y empezó a confesar sus pecados: “Los
hijos de Israel respondieron a Jehová: Hemos pecado; haz con nosotros como
bien te parezca. Solo te rogamos que nos libres en este día.” (Jueces
10:15).

La gente estaba muy abrumada por su pecado, y no podía concebir pedirle a Dios
algo más que su liberación. Su oración más simple fue: “¡Señor,
líbranos solamente por esta vez! No nos permitas ser vencidos o invadidos por
nuestros enemigos!”

Ellos oraron por un sola victoria pero Dios tenía algo más en mente. ¡Él
respondió su oración sobre abundante y poderosamente! No solamente Israel
obtuvo protección sino que recibió ayuda de lo Alto! ¡Ellos derrotaron por
completo a los amonitas!

“Jefté fue a pelear contra los hijos de Amón, y Jehová los entregó en sus
manos.Desde Aroer y hasta llegar a Minit conquistó veinte ciudades, y hasta la
Vega de las viñas los derrotó con gran estrago. Así fueron sometidos los
amonitas por los hijos de Israel. (Jueces 11:32-33).

Dios no solamente libró a Israel, sino que también ¡les dió la valentía y
la dirección para derrotar a los amonitas! ¡Desde ese momento Israel los
venció y nunca más volvieron a tener problemas con ellos! ¡Ellos obtuvieron
victoria total!

¡Es justamente así como Dios quiere contestar en sobre abundancia las
oraciones de su pueblo hoy día! La mayoría de los cristianos oran, “Señor,
solamente dame la victoria sobre esta batalla.” Pero el Señor responde, “
Yo te daré lo que pides, y aún tengo más cosas preparadas para tí. Quiero
vencer a tu enemigo pero no quiero darte una victoria a la vez. Quiero que
tengas la victoria total!”

Amado, ¡Él quiere darle el poder no solamente para vencer, sino para derrotar
a cada enemigo! Él quiere que usted no solamente conquiste su pecado sino que
sea más que vencedor. Él quiere que usted no solamente tenga vida, sino vida
en abundancia. Él quiere que usted no solamente tenga gozo sino gozo
inexplicable y gloria total. Él quiere que usted no solamente sea libre del
temor por un día, semana o mes- ¡sino durante todos los días de su vida!

DAVID WILKERSON

miércoles, 5 de octubre de 2011

LA BATALLA DE JACOB FUE CON EL SEÑOR

Una de las lecciones más grandes que nosotros podemos aprender es que nuestra
batalla nunca es con la gente. Ésta no es contra compañeros de trabajo,
vecinos, o seres queridos que no han sido salvos - sino con Dios.

Si usted alinea todas las áreas de su vida con Dios, todo lo demás se
acomodará en su lugar. Cuando usted se encuentra en rectitud con Él-
cubierto con la sangre de Cristo, sin pecado en su vida, y en oración
constante- entonces ¡todos los demonios del infierno no pueden afectar lo que
Dios quiere hacer! Él quiere que usted posea fortaleza divina.

Oseas dijo, “Pleito tiene Jehová con Judá (Su pueblo)” (Oseas 12:2).
¿Cuál es la controversia que Dios tiene con Su iglesia? ¡La pereza
espiritual! Nosotros queremos milagros, bendiciones, liberación a ningún
costo y sin ningún esfuerzo!

¿Quiénes en el pueblo de Dios hoy en día oran toda la noche, luchan,
sollozan, claman al Señor como lo hizo Jacob? ¿Quién está tan determinado
por agradar a Dios que se encuentra desesperado por ser librado de todo
hábito, de toda lujuria- y clama y pelea con Dios hasta que Él rompa todas
las cadenas?

Oseas le dijo a Israel, “¡Todo lo que tú quieres es prosperidad y
seguridad! Tú no estás dispuesto a tomar tu posición. ¡Tú no quieres vivir
complaciendo a Jehová, sino a ti mismo!”

Jacob era un guerrero desde el día en que nació. Él prevaleció “por su
fortaleza” (ver Génesis 25:26) y ¡lo mismo debemos hacer usted y yo!
¡Nosotros tenemos Su fortaleza pero no la utilizamos !“Fortalecidos con todo
poder, conforme a la potencia de su gloria, obtendréis fortaleza y
paciencia.” (Colosenses 1:11).

“...para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser
fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu...” (Efesios
3:16).

¡La iglesia de Cristo Jesús nunca va a poder ver lo que Dios tiene preparado
hasta que Él vea que le buscamos diligentemente! “La oración eficaz del
justo puede mucho.” (Santiago 5:16).

Dios quiere que usted se acerque a Él pues le ama! Él le está diciendo,
“¡Aquí está. Si tú lo quieres, ven y tómalo!” ¡Él quiere hacer de
usted un soldado fuerte y preparado para formar parte de Su ejército!

David Wilkerson

martes, 4 de octubre de 2011

¡JACOB ESTABA EN CRISIS -DE NUEVO!

Jacob estaba nuevamente en medio de una terrible crisis y no sabía qué hacer.
La Biblia dice: "Entonces Dios dijo a Jacob: "Levántate, sube a Betel y
quédate allí"…Y dijo Jacob… "Pongámonos de pie y subamos a Betel, y
haré allí un altar a Dios, quien me respondió en el día de mi angustia, y
que me ha acompañado por dondequiera que he andado" (Génesis 35:1-3).

¡Betel es un lugar donde podemos ir en nuestro tiempo de angustia! La lección
para Israel y para nosotros hoy es la siguiente: Cuando Jacob estaba en peligro
o dificultad, -cuando las cosas se vislumbraban sin esperanza- ¡sabía a
dónde ir y qué hacer!

Dios le estaba diciendo a Jacob: "Sabes dónde te hablaré, dónde oirás mi
voz. ¡Vuelve a Betel! Ve al altar donde te conocí. ¡Póstrate delante de mí
y limpia tu casa de toda idolatría!"

Jacob llamó a sus hijos para sacar a todos sus ídolos y los enterró debajo
de un roble. Luego dirigió a su familia a Betel y allí erigió un altar
delante de Dios. Una vez más Dios le dijo a Jacob: "Yo estoy con vosotros"
(Génesis 35:9-13). La Escritura dice: "El terror de Dios fue sobre las
ciudades que estaban a su alrededor, y no persiguieron a los hijos de Jacob"
(Génesis 35:5). Las ciudades vecinas tenían miedo de Jacob – el pequeño
clan judío- porque ¡Dios había puesto temor en ellos!

¡El Señor sigue siendo el Dios de Betel! Y Él nos está diciendo: "Id a
Betel, ¡porque voy a encontrarte ahí! Cada vez que te encuentres en problemas
o angustia ¡corre hacia el altar! ¡Clama y permanece a solas conmigo!" ¡Él
está esperando que nos encontremos con Él en el armario secreto de oración!

¡Jacob sabía a dónde ir para obtener una Palabra clara de parte de Dios!
¡Fue a Betel, al altar! ¡Se encerró con Dios en el armario secreto! Creo que
Dios habla con nosotros, creo que nos da Palabra. Pero, ¡esto ocurre cuando
estamos de rodillas! ¡Ahí es donde Dios dice que se reunirá con nosotros!

Dios le está llamando hoy para que quite sus ojos de todas las circunstancias,
para que no juzgue nada con base en su condición actual. No trate de entender
lo que está ocurriendo. No deje que el miedo le abata. ¡Dios se encontrará
con usted en oración!

DAVID WILKERSON

lunes, 3 de octubre de 2011

¡NO ESTÁ LISTO PARA LUCHAR!

Supongamos que un entrenador de boxeo lleva a su luchador a un campo de
entrenamiento aislado y pasa toda la sesión de entrenamiento preparando
psicológicamente a su hombre para la gran pelea. Él le dice: "Yo estaré
contigo en primera fila, Nunca dejaré de estar a tu lado. Aquí está una
lista de los grandes boxeadores del pasado, estudia todos sus movimientos. No
tienes que sufrir entrenamientos duros. ¡Te dije que eres un ganador y mi
palabra es todo lo que necesitas! Yo te daré algunos diagramas sobre cómo
derrotar al hombre monstruo cuando subas al ring para pelear contra él! "

¿Qué clase de entrenador hace esto? ¡Absolutamente absurdo! ¿Qué haría un
buen entrenador? El encontraría al mejor boxeador y ¡subiría a su hombre al
ring para pelear con él!

Amado, ¿cuántos cristianos se llaman a sí mismos guerreros sin haber sido
jamás probados o capacitados? Oímos mucho acerca de los muchos guerreros en
esta nación. Pero la triste verdad es que la gran mayoría de ellos ¡nunca
han estado en la batalla! ¡Ellos no han sido entrenados y no están listos
para luchar!

Hace poco le pregunté al Señor por qué muchos de los verdaderos creyentes
están pasando por tiempos tan pesados, tan duros. ¿Por qué estos
sufrimientos tan profundos? Le pregunté, "¿Por qué muchos están siendo
probados hasta el límite?"

Dios sabe que Satanás será desatado en la tierra para su última hora de
batalla. Y el Señor va a necesitar guerreros bien entrenados que prevalecerán
sobre todos los poderes del infierno. En este momento, Él está haciendo una
obra rápida en su remanente -se llama ¡entrenamiento de crisis!

Estos sufrimientos y pruebas profundas de los santos están formando a los
capitanes de Su ejército de los últimos días. Dios está poniendo en ellos
el Espíritu Santo guerrero y Él está sacando soldados que han sido probados
porque han luchado con Dios. ¡Cuanto más sufren y más intensa es la prueba
mayor es la obra que Él tiene preparada para ellos!

Este tipo de entrenamiento demanda disciplina física y espiritual. Jacob
lanzó todo su cuerpo a la batalla, toda su capacidad humana. Un espíritu de
lucha se había levantado dentro de él y la Escritura dice: "En su fuerza él
luchó con Dios" (Oseas 12:3).

Este versículo tiene un gran significado para todos los que quieren prevalecer
en la oración. Dice que Jacob ganó la batalla "en su fuerza." Querido Amado,
si usted va a prevalecer en estos últimos días ¡usted va a tener que poner
todo su cuerpo y fuerza en ello!


DAVID WILKERSON

viernes, 30 de septiembre de 2011

¡DIOS RESPONDE LA ORACION CON MAS DE LO ESPERADO!

Una de las frases más escuchadas en la iglesia es “¡Dios responde la
oración!” Sin embargo ésta es un verdad a medias. La verdad es que “Dios
responde la oración con más de lo esperado!

Oseas profetizó a Israel “Ustedes que han caído por su pecado pero aún son
pueblo de Dios” (ver Oseas 14:1). “Llevad con vosotros palabras de súplica,
volved a Jehová y decidle: «Quita toda iniquidad, acepta lo bueno, te
ofreceremos la ofrenda de nuestros labios.” (Oseas 14:2).

La oración de Israel fue simple. Todo lo que ellos le pidieron a Dios fue que
quitara su pecado y que los recibiera con gracia. “¡Señor ten misericordia!
Limpianos y recíbenos bajo Tu gracia.” ¡Dios no solamente los limpió y
recibió con gracia sino que Él también añadió bendiciones que fueron más
allá de su imaginación!

“Yo los sanaré de su rebelión, los amaré de pura gracia, porque mi ira se
apartó de ellos.Yo seré a Israel como rocío: él florecerá como lirio y
hundirá sus raíces como el Líbano. Se extenderán sus ramas, su gloria será
como la del olivo y perfumará como el Líbano. Volverán a sentarse a su
sombra; serán vivificados como el trigo y florecerán como la vid; su olor
será como de vino del Líbano” (Oseas 14:4-7).

El rocío del cielo (14:5) es la presencia del Señor. Hasta ese momento había
sequía y todo estaba desvaneciendo porque el favor del Señor se había
apartado. Pero ahora, debido al arrepentimiento verdadero y a la oración
proveniente de un corazón honesto, Dios dijo que Él traería vida a todo
lugar. ¡Israel no solamente fue perdonado sino también revivido! Ellos ahora
estarían bien cimentados, expandidos y prosperados!

Todo lo que ellos pidieron fue misericordia, perdón y aceptación. En su
lugar, ¡Dios abrió las ventanas de los cielos y derramó sobre ellos
bendiciones que ellos nunca esperaron recibir! ¡Dios respondió su oración
sobreabundantemente!

¡Dios ha hecho lo mismo por usted! Cuando usted se arrepintió, todo lo que le
pidió a Dios fue un corazón limpio, perdón y paz. Sin embargo, observe cómo
Él ha contestado su oración rebasando sus peticiones: Él le dio un corazón
hambriento -¡hambre por más de Jesús! Él le dio ojos para ver y oídos para
escuchar. Él lo ha protegido del diablo malvado y ha inundado su alma con
esperanza, gozo y felicidad!

¡Usted solamente pidió ser salvo y limpio, y Dios ha derramado sobre usted
bendición tras bendición! ¡Él le ha contestado sobreabundantemente!

DAVID WILKERSON

jueves, 29 de septiembre de 2011

EN ÁNIMO DE LUCHA

Esaú saldría primero del vientre de su madre -un bebé cubierto de pelo (su
nombre significa "velludo”). Sin embargo, Jacob, su hermano gemelo, tomó su
talón mientras todavía estaba en el vientre. ¡Qué sorpresa debe haber
tenido la partera cuando vio venir a Esaú con una pequeña mano agarrándole
el talón!

“En el seno materno agarró a su hermano por el talón, y cuando creció
luchó con un ángel y logró vencerlo. Luego lloró, y cuando lo encontró en
Betel le rogó. Allí él habló con nosotros;" (Oseas 12:3-4).

¡En este pasaje muy breve acerca de Jacob, el profeta Oseas resume la manera
de vencer y prevalecer con Dios!

El mensaje de Oseas fue: "¡Aquí estaba un hombre ávido de Dios, con hambre
de todo lo que Dios tenía para él!" Jacob salió de la matriz con espíritu
de lucha, ¡anhelando las bendiciones de Dios! Había algo así como un
instinto divino en este niño. Era como si le dijera a Esaú: "Hermano, si
usted no quiere la plenitud de Dios, Yo sí. ¡Fuera de mi camino! ¡No me voy
a quedar atrás de las bendiciones de Dios!"

La primogenitura y la bendición que Jacob deseó a lo largo de su vida
¡representan todas las bendiciones que están en Cristo Jesús! Sin embargo,
Jacob no iba detrás de la doble porción de la riqueza de su padre, ni tampoco
detrás de la promesa de la tierra. No, Jacob quería algo más. Él quería la
bendición de Dios para que ¡él pudiera estar en el linaje del Mesías! Él
quería la bendición del sacerdocio. Esto significa no sólo ser sacerdote del
clan, sino también ¡ser capaz de bendecir a otros!

Vemos este ministerio sacerdotal a través de Génesis 27, cuando Isaac impuso
sus manos sobre Jacob y lo bendijo: "… que tu alma me bendiga "(Génesis
27:19); esto significaba el gran honor de tener la mano de Dios sobre él y
¡poder para bendecir a otros!

Amados, ¡esto es lo que se requiere de los creyentes en estos últimos días!
Dios quiere levantar a un pueblo que no se preocupe sólo de su propio
sustento, de tener una casa o de conducir un buen auto. Él está buscando a
aquellos que están ávidos de las bendiciones de Dios, no para su propio
beneficio ¡sino para que sean usadas por Él para bendecir a otros!

DAVID WILKERSON

miércoles, 28 de septiembre de 2011

EL LENGUAJE DE LA REVOLUCIÓN

"Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada, pero la lengua de los
sabios es medicina." (Proverbios 12:18, RV1995).

Con grandes y dolorosas palabras

hablan los revolucionarios.

Como la penetración de una espada,

ellos azotan con sus lenguas

el orden establecido del día.

El hombre maligno excava maldad

Y en sus labios hay un fuego ardiente,

El fuego permanente del infierno.

Pero el hombre impío será atrapado

Por la transgresión de sus propios labios.

El que guarda su boca,

Guarda su vida,

Pero el que mucho abre su boca

Padecerá calamidad.

Los hombres justos odian los labios mentirosos

Y los labios que no traen sanidad.

La lámpara de los impíos será apagada

Y sus labios sellados;

El lenguaje perverso

Será destruido

Y la lengua de los sabios

Traerán sanidad.

DAVID WILKERSON

martes, 27 de septiembre de 2011

¿DONDE SE HALLA LA SABIDURIA?

“Mas, ¿dónde se halla la sabiduría?¿Dónde se encuentra el lugar de la
inteligencia? No conoce su valor el hombre, ni se halla en la tierra de los
seres vivientes.” (Job 28:12-13).

Sabiduría,

¿Quién puede hallarla?

¿Dónde?

El abismo dice: "No está en mí"

El mar: "Tampoco está conmigo".

No se dará a cambio de oro

ni su precio será a peso de plata

No puede ser pagada..... ónice precioso

o. . .zafiro.

No puede intercambiarse por joyas,

¿Y qué decir del coral o de las perlas?

La sabiduría vale más

que las piedras preciosas

¿De dónde, pues, procede la sabiduría

y dónde se encuentra el lugar de la inteligencia?

Dios es quien conoce el camino de ella

y sabe dónde está su lugar.

El que observa hasta los confines de la tierra

y le da peso al viento,

Dijo al hombre:

"El temor del Señor es la sabiduría, y el apartarse del mal, la
inteligencia.”

El temor del Señor es el principio

De toda sabiduría.

Aquél que obtiene sabiduría,

En amor

Teme a Dios

Y sus pecados son perdonados.”


DAVID WILKERSON

lunes, 26 de septiembre de 2011

DIOS ME FAVORECE

“Clamaré al Dios altísimo, al Dios que me favorece.” (Salmo 57:2,
RV1995).

Creo en un Dios que actúa,
Quién puede librar mis pies de caída
Y sostenerme durante cada calamidad.
Cuando yo tema confiaré en Él.
Él librará mi alma con paz
De la batalla levantada en contra mía.

Yo clamaré a Dios
Y El me salvará.
Él guardará mis lágrimas
Y dirigirá mis pasos.
Cuando clame a Él,
Mis enemigos serán derrotados
Porque Dios me favorece.
En Él yo deposito mi confianza.
No temeré de lo que él hombre pueda hacerme;
Mi corazón está dispuesto.
Cantaré y entonaré salmos;
Mi alma estará satisfecha.

Él me pasará por fuego y ríos
para llegar a un anhelado remanso de paz.
Su rostro brillará sobre mí.
Y diariamente me llenará de sus beneficios.
Su rostro no esconderá de mí.
Sino me escuchará prontamente.
Él nunca me traerá confusión,
Pues Él ha pronunciado como mandamiento salvarme—
Porque Dios me favorece.

DAVID WILKERSON

jueves, 22 de septiembre de 2011

¡DIOS QUIERE HABLARLE!

Dios desea hablar con usted como si estuviera sentado cenando con Él. Él
quiere conversar con usted sobre todo, sobre cualquier asunto, de corazón a
corazón. La Biblia dice: "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo. Si alguno
oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo "
(Apocalipsis 3:20).

Este versículo a menudo se ha utilizado para referirse a los inconversos.
Hablamos de Jesús parado a la puerta del corazón del pecador, buscando
entrar. Pero no, aquí ¡Cristo les está hablando a los creyentes!

El contexto muestra que Cristo les está hablando a aquellos que están
vestidos de ropas blancas (la justicia), que han comprado oro probado en el
fuego, cuyos ojos están ungidos (tienen una revelación), que son amados,
reprobados y castigados (ver Apocalipsis 3:15-19). Éstas son personas
arrepentidas, ¡gente santa que quiere conocer la voz de Dios!

Al leer y releer el versículo 20 en este pasaje, tres palabras me resaltaban:
"¡Abre la puerta! ¡Abre la puerta!" Y el Espíritu de Dios habló claramente
a mi corazón:"¡David, la razón por la cual no me has oído como quiero ser
escuchado es porque no estás totalmente abierto en tu espíritu para
escuchar!"

Desde mi perspectiva, esta puerta representa un compromiso -que muchos
cristianos aún no han hecho por completo- La mayoría de los creyentes oran:
"Señor, todo lo que necesito es un pequeño consejo, unas palabras de
dirección, un recordatorio de que me amas. Sólo déjame saber si estoy
haciendo bien o mal. ¡Ve delante de mí y abre las puertas!"

Pero Jesús nos responde: "Si todo lo que quieres de mí es dirección, puedo
enviarte un profeta. Si sólo quieres saber a dónde ir y qué hacer, puedo
enviar a alguien que haga las veces de guía. Pero ¡me estás perdiendo!"

Jesús quiere su cercanía, sus emociones más profundas, su lugar secreto.
Quiere sentarse con usted y compartir todo lo que está en Su corazón, hablar
con usted cara a cara. Apocalipsis 3 es un cuadro maravilloso de esto. Habla
del amor y de la intimidad, de compartir secretos con entonaciones suaves y
tiernas.

Cuando Jesús entra, trae alimento y pan, en otras palabras, Él mismo ingresa.
Cuando se alimente de Él ¡usted estará satisfecho por completo!

DAVID WILKERSON

martes, 20 de septiembre de 2011

ARRAIGADOS Y CIMENTADOS EN AMOR

"Para que por la fe Cristo habite en sus corazones, y para que, arraigados y
cimentados en amor, sean ustedes plenamente capaces de comprender, con todos
los santos, cuál es la anchura, la longitud, la profundidad y la altura del
amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor, que excede a todo conocimiento,
para que sean llenos de toda la plenitud de Dios. "(Efesios 3:17-19).

En este versículo “arraigados y cimentados” significa "construir en virtud
de un cimiento profundo y estable de conocimiento y comprensión del amor de
Dios hacia usted." En otras palabras, ¡el conocimiento del amor de Dios hacia
usted es la verdad fundamental sobre la cual todas las otras verdades deben ser
construidas!

Por ejemplo, el temor de Dios está basado en esta verdad. El santo temor de
Dios no es sentir terror de que él esté listo para abatirle si lo descubre
cometiendo alguna pequeña falta. Más bien, es el temor de su santidad contra
la rebelión y de lo que él hace a los que aman más las tinieblas que a la
luz.

Los cristianos que viven en culpa, miedo y condenación no están "arraigados y
cimentados" en el amor de Dios. Nuestro Padre celestial envió a su Hijo a morir
por nuestros pecados y debilidades. Y sin conocer plenamente y comprender
completamente este tipo de amor, usted ¡nunca tendrá un cimiento estable o
permanente!

"[Que Usted]. . . puede ser capaz de comprender. . . el amor de Cristo
"(Efesios 3:18-19). Aquí la palabra griega para “comprender” indica
"apoderarse con avidez o echar mano de." El apóstol Pablo da los medios para
que usted aproveche esta verdad y la convierta en el fundamento de su vida
cristiana. Pablo lo exhorta a que saque sus manos espirituales y diga: "¡Voy a
echar mano de esto!"

Tal vez usted es asaltado por una tentación que no puede quitarse de encima. O
quizá usted tiene una sensación de no ser suficiente, una sensación de
indignidad, o miedo a que el diablo lo engañe y usted llegue a fallarle Dios.

¡Este es el día para que despierte al amor de Dios hacia usted! Oro para que
mientras usted lee este mensaje, algo golpee profundo en su corazón, y usted
sea capaz de decir: "Tiene razón, hermano David. Ese soy yo y ¡no quiero
vivir de esta manera!" Ruego para que usted se apodere de esta verdad que le
abrirá los ojos y le ayudará a entrar por completo en un nuevo reino de
alegría y paz en su diario caminar con Él.


DAVID WILKERSON

viernes, 16 de septiembre de 2011

OBEDECIENDO LA VOZ DEL SEÑOR

Si usted quiere dirección, si piensa que está listo para hacer lo que Él
pide, entonces déjeme preguntarle: ¿Está listo para recibir una palabra
inquietante, una misión de dificultad y rechazo, una vida de fe sin garantía
de comodidades excepto las del Espíritu Santo?

¡Eso es exactamente lo que le sucedió a Isaías! El profeta se ofreció:
"Envíame, Señor," y ¡Dios le envió a una misión dura y difícil!

"Dijo entonces: Ve y dile a este pueblo: “Oigan bien, pero no entiendan; vean
bien, pero no comprendan.” Entorpece el corazón de este pueblo. Cierra sus
oídos, y ciega sus ojos. Que no vea con sus ojos ni oiga con sus oídos, ni
entienda con su corazón, para que no se convierta ni sea sanado."(Isaías
6:9-10).

¡La palabra que oyó Isaías no era halagadora! Por el contrario, lo haría
odiado e impopular. El Señor le dijo: "¡Ve, endurece a aquellos que se niegan
a oírme hablar! Cierra los ojos y los oídos. ¡Termina de endurecer su
corazón!"

Si desea conocer la voz de Dios, entonces usted debe estar dispuesto a escuchar
todo lo que Él dice. Dios nunca dirá: "¡Ve!" Hasta que Él primero pregunte:
"¿Quién irá?" Él vendrá a cuestionarle, "¿Estás dispuesto a hacer
cualquier cosa que te digo y ha hacerlo a mi manera? ¿Estás dispuesto a dar
tu vida?"

Cuando años atrás oraba por dirección, el Señor me dijo claramente: "Vuelve
a Nueva York." ¡Esta fue una palabra muy incómoda para mí! Yo me encontraba
listo para jubilarme. Tenía pensado escribir libros y predicar en lugares
específicos. Yo pensé: "Señor, ya he pasado mis mejores años allí. ¡Dame
descanso!"

Sí, queremos escuchar la voz de Dios, pero deseamos oírla cómodamente. No
ansiamos que ésta nos sacuda. Sin embargo, ¿por qué Dios nos daría su voz
de dirección si no está seguro de que le obedeceremos?

Abraham aprendió en primer lugar a oír la voz de Dios obedeciendo prontamente
lo que en su momento había escuchado. La palabra de Dios para él era
sacrificar a su hijo, Isaac (Génesis 22:2). Abraham actuó conforme a esa
palabra y su obediencia se convirtió en un aroma perfumado que tocó el mundo
entero: "En tu simiente todas las naciones de la tierra serán bendecidas,
porque obedeciste mi voz" (Génesis 22:18).

DAVID WILKERSON