jueves, 29 de agosto de 2013
MEJORES AMIGOS
¿A quiénes consideras tus mejores amigos? Lo creas o no, este asunto es de
gran interés del Señor porque tus amistades hablan en alta voz, tanto a Dios
como al mundo, sobre la condición de tu corazón.
“Señor, ¿qué piensas de mis amistades? ¿Te agradan?” ¿Alguna vez has
pensado en hacerle a Dios estas preguntas? El hecho es que un amigo justo puede
proporcionar un vínculo a la bendición y el favor de Dios, porque te alienta a
llevar un estilo de vida piadoso. Por otro lado, un amigo injusto puede
encadenarte a toda clase de mal, conduciéndote a terribles ataduras.
Al usar la palabra “amigo” a lo largo de este mensaje, no me refiero a los
miembros de tu familia inmediata. Mi definición de un amigo es alguien con
quien estés estrechamente relacionado, en el que tú confías, naturalmente.
En resumen, un amigo es alguien con quien uno camina y habla y a quien uno le
abre su alma.
Probablemente tengas varios círculos de amigos: un círculo de "negocios", que
incluye a tus compañeros de trabajo, socios o clientes; un círculo "social",
que incluye a aquéllos con los que te juntas a un nivel superficial. Puedes
también tener contacto con conocidos impíos. El apóstol Pablo dice que es
imposible evitar este tipo de contactos, de lo contrario, ¡tendríamos que
dejar el mundo en su totalidad!
Sin embargo, el círculo que le preocupa más a Dios, es tu círculo íntimo,
tus amigos íntimos. Éstas son las personas que más quieres, y que más
influyen en tu vida. Son naturalmente atraídos el uno al otro y están de
acuerdo en la mayoría de las cosas, de tal forma que se sienten seguros de
abrir el uno al otro su corazón.
La Biblia nos dice que no debemos ignorar las maquinaciones de Satanás. Y uno
de los ataques más comunes del diablo contra nosotros es traer a nuestro
círculo íntimo de amigos, a alguien que está caminando en engaño, un agente
del infierno cuya misión es destruirnos. Satanás utiliza especialmente este
truco con los cristianos solitarios o compasivos, tratando de convertir la
bondad de una persona sin discernimiento, ¡en una afinidad con un espíritu
maligno!
“No erréis; las malas conversaciones [compañías] corrompen las buenas
costumbres [personas]” (1 Corintios 15:33).
DAVID WILKERSON
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario