Tu Señor, eres mi fuerza.
Yo te amo, eres tu mi protector
Mi lugar de refugio, mi libertador
y mi Dios.
La roca , donde puedo ocultarme,
Mi escudo, el poder que me salva
aún de mi misma.
Te agradezco el haberme salvado.
Gracias, por soportarme con paciencia.
Gracias, Señor por tu misericordia,
que es nueva cada mañana, para conmigo
Transforma mi corazón , para que así como
tu eres conmigo, así, sea con mi prójimo,
porque muchas veces exijo a otro lo que
lo que tu nunca me exiges a mi.
No dejes que me siente en silla de escarnecedores
ni cierre mi labios, ni mis manos al necesitado.
Solo tu puedes obrar en mi .
Amen
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