Jesús , quiero abandonarme en tus brazos,sentir tus manos acariciando
mi alma, mientras la acaricias se van las cargas,siento la yema de tus
dedos quitando la dureza ,y se vuelve mas y mas sensible a ti
Siento la sangre derramada en la cruz que gotea sobre mi cabeza y comienza
a recorrer mi cuerpo limpiando mi mente y a medida que la limpia van surgiendo
tus pensamientos y tu sangre sigue recorriendo mi cuerpo , quiebra el yugo de
tensión nerviosa que se apodero de mi cuello.
Siguiendo su recorrido pasa por mi corazón que se va dejando ver ,vuelve a su
color rojo brillante,resplandeciente.
Hay una redoma de aceite que unge mis labios que se abren y digo :
Hermoso, hermoso eres Jesús
Hermoso es tu amor Señor Jesús.
Esas gotas de aceite toca también mis ojos de los cuales brotan lagrimas.
Estoy ahora arrojada a tus pies besándolos y mis lagrimas los lavan
a medida que las lagrimas los recorren , se dejan ver cascaras que tapan
las heridas de los clavos.
Ahora me levanto, limpia, libre , fortalecida y salgo para enfrentar este
nuevo día donde tu misericordia y fidelidad han sido renovadas.
Gracias Señor, nos vemos mañana a la misma hora.
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